La presión policial contra la venta ambulante ha logrado en dos años reducir a la mitad el número de manteros que se despliegan en el paseo marítimo de Roses (Girona), además de reducir sus meses de actividad.
Según el balance realizado este jueves por los Mossos d'Esquadra y la Policía Local, este verano se han decomisado 6.000 objetos —juguetes, complementos de moda, gafas de sol, bisutería, ropa, relojes, música y películas— y ambos cuerpos han levantado 131 actas administrativas y han detenido a 19 personas, 16 por un delito de resistencia y tres por un delito de atentado.
La novedad de este año ha consistido en incorporar en los dispositivos a agentes de la unidad subacuática de Mossos y a policías en bañador que han perseguido a los manteros que huían por mar de las redadas para "evitar que el mar sea una vía de escape donde la policía no pueda actuar como ocurría otros años", han indicado ambos cuerpos en un comunicado.
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