El presidente de la Junta de Andalucía, José Antonio Griñán, ha propuesto este jueves que se incluya en el Pacto por Andalucía "un gran acuerdo de concertación social" entre la Confederación de Empresarios de Andalucía (CEA) y los sindicatos "que se dirija a fortalecer la negociación colectiva y a consolidar a los agentes sociales, empresarios y sindicatos como sujetos de diálogo y paz social.

Así lo ha anunciado Griñán en respuesta a una pregunta oral realizada por el portavoz del Grupo Socialista, Francisco Álvarez de la Chica, en la sesión de control al Ejecutivo en el Pleno del Parlamento relativa a empleo y reforma laboral en Andalucía.

Según el presidente, este acuerdo de concertación social serviría, "sobre todo, para que la reforma laboral no acabe con los convenios de sector y provinciales y para que miles de trabajadores no se vean obligados a regular sus condiciones de trabajo solo con su contrato individual", por lo que ha animado a los grupos parlamentarios a apoyar esta iniciativa para combatir la reforma laboral aprobada por el Gobierno de la Nación y que, a su juicio, solo ha servido para "romper el modelo de convivencia con que se había transitado toda la Transición y los años posteriores". "Es una ruptura brutal", ha apostillado.

El presidente, quien ha mostrado la "extrema preocupación" del Gobierno andaluz por el "brutal aumento del desempleo" desde 2007, fecha desde la que en la comunidad casi se han "duplicado" la tasa de población inactiva, ha explicado que "para tomar decisiones" en esta materia lo importante es conocer la realidad, algo que no cree que haya hecho el Gobierno de Mariano Rajoy porque, pese a que puede creerse que la intención de quienes la pusieron en marcha era la de crear empleo, "la realidad es que no lo han conseguido y los resultados son todo lo contrario".

"Desde marzo de 2012 que entró en vigor la reforma hasta ahora el número de expedientes de regulación de empleo han crecido en Andalucía un 54 por ciento, las indemnizaciones por despidos se han reducido casi a la mitad y el descenso de los convenios colectivos ha sido del 44 por ciento. Es brutal que en seis meses tengamos estas consecuencias porque ha pasado esto y, además, el paro ha seguido aumentando", ha argumentado.

Para Griñán, por tanto, lo conveniente es "fijarnos bien en nuestro mercado de trabajo y atender a otras cosas distintas que no sean solo si el mercado de trabajo es rígido o no" porque, a su juicio, "ese no es el debate".

En esta línea, ha apostado por analizar datos como el porcentaje de desempleados entre titulados, no titulados, inmigrantes, mujeres y otros colectivos y, a raíz de ahí, hacer "una semblanza del mercado de trabajo, ver qué hay y saber qué medidas se toman".

Sobre todo, ha insistido, porque la actual reforma laboral del Gobierno de Rajoy "es un sistema simplemente para transferir rentas de los trabajadores a las empresas" porque, como los bancos no prestan dinero, "se transfieren las rentas de los asalariados a empresas". "Ése es el efecto", ha recalcado el presidente, para quien el debate sobre el marcado laboral debería centrarse en el I+D+i, en la competitividad de la economía o en la igualdad de oportunidades "y no en mirar solo las condiciones del mercado de trabajo".

En este punto, ha abogado por buscar nuevas fórmulas y medidas que incidan en la creación de empleo —como poner en marcha una "reconversión" del sector de la construcción, ha ejemplificado— para que la reforma laboral, "que es pura ideología", no rompa ni con el modelo de convivencia actual ni con el modelo territorial, ya que, según ha advertido, la reforma está provocando la "desaparición en las pequeñas y medianas de los convenios sectoriales" y, por tanto, que "solo haya convenios en las grandes empresas".

"Los demás van a tener que negociar su convenio con un contrato de trabajo y eso ya está ocurriendo", ha constatado Griñán para proponer luego el referido "gran acuerdo de concertación social" entre la Junta, la Patronal y los sindicatos y agentes sociales.

"se tritura el acuerdo y el pacto social"

Por su parte, el portavoz socialista De la Chica ha insistido en la idea de que la reforma laboral "ignora y tritura el valor del acuerdo y del pacto social" y "consagra el despido sin causas limitando, además, la negociación colectiva, que queda sustituida por el poder unilateral del empresario" y que, por tanto, se trata de una medida "desequilibrada y nociva para el mercado de trabajo".

En esa línea, ha criticado no solo que haya "sumado" desde su puesta en marcha más de 420.000 desempleados y que la cifra de parados llegue a los cinco millones en el país sino que, además, esté "poniendo en peligro a los 17 millones de españoles que sí están trabajando". "Es un sacrificio a cambio de nada", ha apostillado De la Chica tras reiterar que esta reforma "no resuelve problemas sino que los empeora".