El presidente de la Generalitat valenciana, Alberto Fabra, ha destacado este miércoles que el Corredor Mediterráneo "puede ser uno de los instrumentos estratégicos de futuro para la Unión Europea" dado que "hace que Europa pueda contar con un frente muy potente de desarrollo económico, de posibilidades de futuro, como es todo el frente mediterráneo, el sur de Europa".

Así lo ha señalado durante la apertura del seminario de la Comisión de Política de Cohesión Territorial (Coter) acerca de las repercusiones y el efecto multiplicador sobre la cohesión territorial del mecanismo 'Conectar Europa', en la que también han intervenido el presidente del Comité de las Regiones y de la Región de Murcia, Ramón Luis Valcárcel, y el presidente de la Comisión Coter, Marek Wozniak.

Valcárcel ha subrayado que Fabra es "un magnífico defensor" de esa infraestructura, "con argumentos muy sólidos de lo que significa el Corredor Mediterráneo dentro de esas redes transeuropeas de transporte para el interés de España y de la UE", al tiempo que ha reivindicado que "tiene garantizado desde el primer minuto el éxito, la rentabilidad y con ello, la contribución al desarrollo de la UE".

En este sentido, ha detallado las razones que avalan ese eje, que aglutina a cinco comunidades autónomas que concentran "la mitad de lo que se produce en España, de los habitantes y de la aportación al PIB nacional". "Nadie pide caprichosamente infraestructuras porque parece que estamos en la moda de pedir cosas independientemente del valor y rentabilidad de las cosas, no en este caso", ha zanjado.

Además, ha instado a "cambiar la mentalidad" en materia de financiación y que la iniciativa privada se una a los esfuerzos públicos. "Ese es el escenario, las posibilidades ciertas", ha sentenciado.

Por su parte, Fabra también ha abogado por "incrementar las conexiones de las telecomunicaciones" al considerar que "Europa debe tener repartidas las oportunidades y el acceso a la información durante largo tiempo y a través de todos los territorios que componen la UE".

Velocidades de crecimiento

"No podemos ni debemos intentar que haya distintas velocidades dentro del crecimiento europeo, debemos trabajar para que todos puedan tener las máximas oportunidades, mejorando las infraestructuras, las conexiones entre las regiones y posibilitando que todos puedan tener acceso tanto a la información como a los sistemas energéticos repartidos entre toda la UE", ha sentenciado.

Fabra también ha remarcado la necesidad de apostar por las redes de conexión entre las regiones y los municipios que, para la Comunitat Valenciana y el frente mediterráneo, "posibilita el conectar mercados, regiones y sobre todo incrementar oportunidades para todos los ciudadanos de la UE".

A su juicio, de cara al futuro, "la apuesta es tener una UE donde los ciudadanos puedan tener más oportunidades, más derechos y vivir en mejores condiciones, y para eso la responsabilidad de las regiones y los municipios es fundamental" como encargados de la "pequeña política, la del día a día", que "es la que permite que los ciudadanos puedan tener un mejor entorno donde poder desarrollar sus vidas".

La comunitat como "ejemplo" de mejorar condiciones de vida

De hecho, sostiene que la Comunitat Valenciana "es un claro ejemplo de lo que tenemos que conseguir a nivel europeo" por sus "telecomunicaciones" y, fundamentalmente, por "el empuje de todos los esfuerzos que hacen los empresarios, la sociedad, para mejorar las condiciones de vida de los ciudadanos".

Fabra ha subrayado que esa realidad les "obliga a ser muy exigentes, a preparar las mejores condiciones, el mejor marco para poder tratar ese futuro", al tiempo que se ha comprometido a "trabajar conjuntamente" con la Comisión Coter en su "difícil tarea de conseguir lo mejor para la UE" para "facilitar que esas oportunidades necesarias de futuro sean una realidad para todos los ciudadanos".

En el actual momento de dificultad económica, aboga por "centrar las cuestiones en aquello que puede ser positivo para nuestros ciudadanos y nuestras regiones" y subraya que en los debates sobre las "estrategias que deben producirse en Europa para poder encaminar un futuro con mayores garantías", puede que no se haya "escuchado suficientemente la voz de las regiones y de los municipios".