El Gobierno de Cantabria destinará 8 millones de euros para desarrollar acciones formativas para los desempleados de la región, algunas de ellas dirigidas a aquellos procedentes de sectores en crisis, y también para ayudar a los autónomos a la consolidación de sus negocios.

En total, serán casi 3.000 personas, entre desempleados y autónomos, las personas que podrían verse beneficiadas por estas acciones formativas, según han informado en una rueda de prensa la consejera de Economía, Hacienda y Empleo, Cristina Mazas, y la directora del Servicio Cántabro de Empleo, María Ángeles Sopeña.

Estos ocho millones para acciones formativas se incluyen en una orden aprobada el pasado jueves en el Consejo de Gobierno, en la que, por una parte, se prevén 7,5 para acciones formativas para facilitar la reinserción en el mercado laboral de los desempleados y, por otra, otros 0,5 para aquellas dirigidas a los parados de los sectores en crisis y a los autónomos.

Concretamente, las acciones para autónomos van dirigidas a acciones formativas en campos como la gestión, la gerencia, el marketing o la internacionalización, actividades que aunque no son propiamente productivas sí son "necesarias", según Sopeña, para la consolidación de estos negocios.

Formación para desempleados

En relación a las acciones para desempleados que se financiarán con los 7,5 millones de euros previstos en la orden, y que se repartirán por toda la región —principalmente en Santander, Camargo y Torrelavega—, irán dirigidas a formarles en sectores de actividad que actualmente están demandando trabajadores y que en el medio y largo plazo tienen todavía "mejores expectativas" laborales.

También lo harán en aquellos sectores considerados "estratégicos" por el Ejecutivo regional en línea con lo establecido en el Plan InverCantabria.

Además, 119 de los 184 cursos que se impartirán para desempleados buscan la obtención de certificación profesional de sus participantes.