El delegado del Gobierno en Melilla, Abdelmalik El Barkani, ha anunciado el reforzamiento de la vigilancia del perímetro fronterizo que separa Melilla de Marruecos ante el convencimiento de que se van a producir nuevos intentos de avalanchas. Así lo ha declarado en rueda de prensa después de los tres saltos registrados en apenas 48 horas, en los que más de 450 subsaharianos han intentado saltar la alambrada y más de 120 consiguieron penetrar en suelo español.

Abdelmalik El Barkani ha anunciado así la llegada inminente desde la Península de un tercer grupo de la Reserva de la Guardia Civil, los GRS, que se unirá a los dos que ya están en la ciudad española y conforman en total un grupo de sesenta miembros adicionales a las agentes del Instituto Armado con los que ya cuenta la 2006 Comandancia.

El representante gubernamental también ha comunicado el regreso del helicóptero que sobrevuela los diez kilómetros de perímetro fronterizo, que sirve de disuasión a posibles intentos y avisa de los movimientos de los inmigrantes al otro lado de la alambrada.

El delegado también ha comunicado que ha solicitado la colaboración del Ejército para contar con literas militares para poder atender las necesidades de alojamiento de los 'sin papeles' ya que después de las entradas masivas de esta semana la cifra de acogidos en el Centro de Estancia Temporal de Inmigrantes (CETI) se ha disparado a 853 personas cuando su capacidad óptima es de 480.

No obstante, El Barkani ha admitido que lo que está ocurriendo "no nos coge de sorpresa" porque cifra en millar el número de indocumentados de origen subsahariano que aguardan en las montañas y bosques marroquíes cercanos a Melilla la oportunidad de dar el salto a la ciudad española del Norte de África.

MAFIAS

El delegado del Gobierno se ha mostrado convencido de que los inmigrantes cuentan con ayudas de personas "desde Melilla" para organizar sus saltos y aunque admite "no tener pruebas" no alberga dudas de que cuentan "con la connivencia de gente de aquí".

Abdelmalik El Barkani también ha atacado el papel de "las mafias" que se benefician económicamente de los subsaharianos lucrándose de estas personas "para lanzarlas a realizar unos intentos" en los que pueden incluso perder la vida como los tres que han aparecido ahogados este verano, entre ellos dos menores.

También ha criticado la agresividad que muestran ahora estos inmigrantes que "vienen armados con palos y piedras" y ha subrayado que "si vinieran en son de paz no habría heridos" al referirse a los agentes de la Guardia Civil que han resultado lesionados durante las avalanchas así como el suboficial marroquí muerto este verano al recibir el impacto de un objeto contundente durante una avalancha.

El representante gubernamental ha reclamado de nuevo la implicación de la Unión Europea porque ha destacado que "este no es un problema únicamente de España y Marruecos", país al que ha agradecido su colaboración, sino del conjunto de la Unión Europea "que debe actuar en los países de origen de estas personas" para evitar que se vean forzados a emigrar.