Museos de España, obras de arte con mesa y mantel

Muchos de los grandes museos del mundo albergan magníficos restaurantes y en España hay buenos ejemplos: el Guggenheim de Bilbao, el Reina Sofía o el Thyssen de Madrid o el MNAC de Barcelona permiten disfrutar de la alta cocina.

Los restaurantes de estos museos son un valor añadido a la oferta artística habitual. En Madrid, en pleno triángulo del arte, en el Paseo del Prado encontramos el restaurante Paradis Thyssen, en el Museo Thyssen. Se trata de un restaurante que lleva diez años funcionando y que sólo abre en el horario del museo. Entre sus especialidades destacan canelones de espinacas y pasas con sopa espumosa de coco y avellanas, salmón en escabeche agridulce con gazpacho de fresones o pechuga de pato asada con yogur.

Pero la oferta gastronómica del Museo Thyssen no acaba aquí; durante los meses de verano abre El Mirador del Museo, situado en el ático, con una extensa y cuidada carta de cavas y vinos para disfrutar de una agradable velada.

Al igual que otros museos y espacios culturales del mundo, el Museo Nacional Centro de Arte Reina Sofía incluye un restaurante, en este caso gestionado por Singularis. Esta marca se caracteriza por ofrecer un servicio gastronómico de altísima calidad a instituciones tan prestigiosas como el Teatro del Liceo de Barcelona o el Museo de Orsay de París. Se trata de una cocina creativa y moderna a la altura de las obras que aloja el museo.

El grupo Arturo es el encargado de dirigir el restaurante del centro cultural Caixa Forum, con una decoración moderna y elegante se ofrece una cocina mediterránea, sana, de calidad y avalada por los años de experiencia de este grupo.

También en Madrid, el Museo del Traje no ha olvidado la gastronomía. El grupo Bokado ha creado un lugar impactante, enclavado en la naturaleza; los hermanos Jesús y Mikel Santamaría se han encargado de dotarle de una propuesta muy innovadora. El local dividido en varias zonas, presenta pintxos y tapas, servicios de cafetería y un precioso comedor con terraza donde podrá degustar lo mejor de la gastronomía de Madrid con un toque vasco.

Tal vez el más conocido de los restaurantes ubicados en museos sea el Bistró Guggenheim Bilbao. Es una propuesta informal, pero al mismo tiempo selecta y llena de personalidad, con vocación de ocupar un lugar diferenciado en la oferta de ocio nocturno de Bilbao. Un espacio vanguardista e innovador donde los toques de alta gastronomía son la nota distintiva.

Este restaurante es uno de los pioneros en fusionar arte y gastronomía y funciona desde el año 2000. Si el edificio de Frank Gehry se ha convertido en un símbolo de Bilbao, su restaurante no lo es menos, con una decoración vanguardista y sugerente ofrece una carta con sabores tradicionales y actuales.

Pero el Guggenheim tiene otra mesa con mantel para elegir. Nerua es una nueva propuesta gastronómica de vanguardia, ubicada en el corazón del Museo, junto a la obra La materia del tiempo de Richard Serra, y con una entrada independiente desde la ría. Una apuesta revolucionaria e innovadora, dirigida por Josean Martínez Alija, que conduce a los visitantes por una experiencia gastronómica única llena de aromas, texturas y sabores.

ambién en Bilbao se puede disfrutar del restaurante Arbolagaña en el Museo de Bellas Artes de Bilbao. Aitor Basabe es el chef encargado de la cocina en la que destacan los pescados elaborados con técnicas modernas, las carnes de caza, la torrija de bacalao, el arroz meloso de trufa y cebollino o el arroz con leche con crema de yema.

Oleum es el restaurante del Museo Nacional de Arte Contemporáneo de Barcelona (MNAC). Funciona desde mayo de 2005 y apuesta por una cocina mediterránea actualizada, basada en la utilización de productos de primera calidad. Oleum está ubicado en el singular Salón del Trono donde Alfonso XIII inauguró la exposición universal de 1929 y ofrece unas excepcionales vistas sobre Barcelona. Conserva la decoración original, que se ha actualizado y complementado con mobiliario y elementos modernos, cómodos y confortables.

La Sucursal es el restaurante del Instituto Valenciano de Arte Moderno (IVAM) donde se combina a la perfección la vanguardia del centro de arte con la creatividad y modernidad de sus platos.