La Dirección de Renault y los integrantes del Comité Intercentros retomarán mañana, miércoles 17 de octubre, las negociaciones sobre el nuevo Plan Industrial propuesto por la multinacional francesa de la marca del rombo para todas las factorías españolas, una reunión que se producirá tras el desencuentro del lunes cuando la empresa planteó una serie de condiciones "desproporcionadas" para los representantes de los trabajadores.

En concreto y según han informado a Europa Press fuentes sindicales, la propuesta empresarial pasa por una revisión salarial en 2013 de acuerdo con el 50 por ciento del IPC, cuando en el actual acuerdo se fija un aumento del 100 por cien de este índice.

Además, en 2013 se aplicaría la flexibilidad que se acuerde para el periodo 2014-2016, donde destaca la propuesta de la empresa de aplicar más/menos una hora de alargamiento de jornada diaria a cargo de la bolsa de horas.

Entre las propuestas para el periodo 2014-2016 destaca el mantenimiento de los salarios de 2013 sin revisión para los tres años de vigencia del plan o, lo que es lo mismo, congelación salarial, a lo que se suma la eliminación de las pagas extra de marzo y septiembre durante los tres años.

Renault ha propuesto asimismo la creación de una nueva categoría de entrada de dos años de duración en los que el trabajador cobraría el 65 por ciento del sueldo de un oficial de tercera mientras que para las actuales categorías se prevé una duración de dos años. En total, según han calculado las mismas fuentes, serían necesarios diez años para llegar a ser oficial de tercera.

En cuanto a las medidas relativas a la jornada, la empresa ha propuesto el incremento de tres jornadas consolidables para el año 2014 hasta alcanzar las 1.689,50 horas, mientras que para 2015 y 2016 se prevén incrementos de 3+1 y 4+1 jornadas consolidables hasta alcanzar las 1.697,25 y las 1.705 horas, respectivamente.

Renault también ha planteado modificaciones para los pluses donde se eliminaría el plus de modificación de la demanda con una reducción a la mitad en los pluses de nocturnidad, turnicidad, festivo y turno fijo de noche. Además, al considerarse las plantas de Valladolid y Palencia como centros únicos de trabajo se eliminaría el actual plus de movilidad.

Sin embargo, la empresa ha abogado por la inclusión de un cuarto turno y "antiestrés" en cualquier factoría y "de forma forzosa".

Por último, Renault no ha descartado recurrir a las ETT's para cubrir casos de necesidades concretas.

Mejorar la competitividad

Renault ha defendido que su objetivo con la propuesta del Plan Industrial es alcanzar el mejor nivel de competitividad para las factorías españolas que garantice los proyectos de futuro recogidos en esa propuesta "para lo cual es imprescindible plantear todas las soluciones posibles".

Según ha asegurado la multinacional francesa de la marca del rombo, su intención es respetar el convenio actual, "siempre y cuando se encuentren las fórmulas de competitividad necesarias en el marco de un acuerdo global".

Renault ha insistido a este respecto que esas fórmulas deberán ser integradas en el dossier que Renault-España tiene que presentar el 9 de noviembre a la sede central para la toma de decisiones sobre la adjudicación de los nuevos trabajos.

"Si el dossier no recoge el nivel esperado de competitividad, la propuesta de Renault-España carecerá de la robustez necesaria para optar a este Plan Industrial", ha advertido la empresam para la que es "indispensable" que todas las partes implicadas en esta negociación asuman su responsabilidad para conseguir los objetivos marcados.

En este sentido, la Dirección de la Empresa ha expresado su confianza en que durante la próxima reunión la representación de los trabajadores haga una propuesta constructiva que permita mejorar las condiciones de competitividad.

Desde la parte sindical, el representante de UGT en el Comité Intercentros, Leandro Martín, ha asegurado que el sindicato está "dispuesto a hablar lo que haga falta" sobre el Plan Industrial pero ha abogado por respetar durante 2013 el convenio pactado en el anterior Plan por el Empleo y la Competitividad.

En concreto, UGT ha manifestado su negativa a negociar las condiciones del Plan Industrial para el trienio 2014-2016 si se continúa planteando la reducción al 50 por ciento del IPC del incremento salarial para 2013.

"Resulta difícil explicar a los trabajadores que una de las partes de la negociación quiere incumplir lo firmado antes de sentarse a acordar nuevas condiciones", ha reflexionado Martín Puertas, que ha reclamado "un poco más de seriedad" a Renault-España.

Por parte de CGT, su representante en el Intercentros, Unai Hernández, ha expresado su profundo malestar ante las condiciones exigidas por la multinacional de la marca del rombo ya que suponen "tirar por el suelo el convenio colectivo y prenderle fuego".

Hernández ha considerado "inasumibles e inaceptables" las propuestas realizadas y que, entre otras medidas, contemplan una reducción del 50 por ciento del incremento del IPC previsto para 2013 y una congelación salarial en el siguiente trienio.

Ante ello, y tras sentar como primera premisa que el convenio de 2013 "no se puede tocar" y tampoco se van a negociar los recortes para el periodo 2014-2016, Hernández ha anunciado una serie de alternativas que dará a conocer a los trabajadores en asamblea y que aún no ha trasladado a la empresa.

Propuestas de cgt

Así, CGT aboga por la creación de una nueva categoría que incluya a todos aquellos trabajadores, cerca de un millar, que están fuera de convenio, fundamentalmente cargos directivos, lo que "permitiría un ahorro considerable a la empresa. Si quieren ahorrar, que empiecen a recortar por los de arriba", ha espetado Hernández.

También ha abogado por la supresión de los llamados 'plus de bufandas' o dinero extra que cobran a mayores los mandos en Navidades por cumplimiento de objetivos. "Es lo que también llamamos como 'prima de látigo', ya que la obtienen a costa de achuchar más a los trabajadores", ha explicado el representante de CGT.

La lista de alternativas de este sindicato se completa con la eliminación de las horas extras, la reducción de los ritmos de trabajo por motivos de salud—evitar el absentismo—y para lograr una mayor eficiencia en las piezas construidas, que las horas de formación sean impartidas dentro del turno de trabajo y una reducción de los precios de los vehículos para hacerlos más asequibles a los trabajadores de la multinacional del rombo, para que éstos, tal y como dijo hace unos días José Vicente de los Mozos, se conviertan en "embajadores de la marca".