El fracaso escolar precipita el hecho delictivo, según un trabajo de Fin de Máster de la VIU

El fracaso escolar es un elemento precipitante para el hecho delictivo según concluye un Trabajo de Fin de Máster realizado por Palmira González Caballero, alumna del Máster Universitario en Prevención e Intervención Psicológica en Problemas de Conducta en la Escuela impartido por la Universidad Internacional Valenciana (VIU), que ha realizado un estudio sobre la situación de menores infractores, en concreto, un total de 410 expedientes.

El fracaso escolar es un elemento precipitante para el hecho delictivo según concluye un Trabajo de Fin de Máster realizado por Palmira González Caballero, alumna del Máster Universitario en Prevención e Intervención Psicológica en Problemas de Conducta en la Escuela impartido por la Universidad Internacional Valenciana (VIU), que ha realizado un estudio sobre la situación de menores infractores, en concreto, un total de 410 expedientes.

El 87 por ciento de los jóvenes tiene un nivel bajo de habilidades escolares. De hecho, aunque en el tramo de edad de 14-16 años sólo un 7 por ciento de los menores no están escolarizados, en el caso de 16 a 18 años la proporción se dispara.

Asimismo, en el estudio se ha podido observar cómo el paso de Primaria a Secundaria supone un receso en los hábitos escolares puesto que son 1º (41 por ciento) y 2º (26 por ciento) de ESO los cursos que más repiten y donde las actitudes y motivación hacia el aprendizaje y los comportamientos en el aula son negativos En este periodo -apunta el estudio- deciden abandonar los estudios para llevar un estilo de vida ocioso y desorientado.

Las lesiones y el robo con fuerza son los delitos y faltas más comunes, relacionadas con brotes psicóticos o móviles lúdicos. Asimismo un 10 por ciento de los expedientes incoados a los menores infractores objeto del estudio son de violencia doméstica, en concreto, un 4,3 por ciento han sido incoados a chicas y un 6,7 por ciento a chicos.

El estudio apunta que la libertad vigilada, las prestaciones en beneficio a la comunidad, la realización de tareas socioeducativas y el internamiento en régimen semiabierto son las medidas que más se imponen a los menores según la sentencia.

La prevalencia de delitos es mayor en los chicos

La investigación, dirigida por la doctora Isabel Iborra Marmolejo, revela cuestiones como que la prevalencia de delitos cometidos por menores es mayor en chicos que en chicas, que el pico más alto para la comisión del delito se da en menores entre los 16 y 17 años o como el fracaso escolar es una variable de gran influencia en la delincuencia juvenil.

El estudio se ha realizado sobre 410 expedientes incoados a menores en el juzgado de menores de Jaén aplicando un cuestionario que estudia asuntos relacionados con las características del menor, con la familia de origen e incluso con el historial delictivo.

El análisis de los expedientes ha puesto de manifiesto que la mayoría de los delitos son cometidos por varones y que los menores que más infracciones cometen se enmarcan en edades comprendidas entre los 16 y 17 años.

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