La Federación Sevillana de Casas Regionales y Provinciales ha celebrado este domingo el efecto positivo que, en su opinión, ha logrado el cambio de escenario del encuentro que éstas vienen celebrando anualmente en Sevilla, que en su cuarta edición se ha desarrollado en la Plaza Nueva y no en el Parque del Alamillo, lo que, según esta entidad, ha contribuido para que la asistencia a este evento "se haya multiplicado por cien" respecto a ocasiones anteriores.

Así lo ha destacado, en declaraciones a Europa Press, el presidente de la Federación Sevillana de Casas Regionales y Provinciales, Antonio Doménech, quien, tras calificar de "éxito" los niveles de participación registrados, ha señalado que el Parque del Alamillo "es un lugar muy bonito, pero está alejado de la ciudad y presenta problemas de transporte", algo que, ha apostillado, no le ocurre a la Plaza Nueva, que está ubicada "en el corazón de la ciudad" y por donde "pasa todo el mundo".

Por ello, Doménech ha querido agradecer al Ayuntamiento, y "especialmente" al concejal de Participación Ciudadana y Coordinación de Distritos, Beltrán Pérez, el "potencial" que ha destinado para "convertir en realidad" el deseo de las casas regionales de celebrar su encuentro "en la Plaza Nueva o la Plaza de San Francisco".

Además, el presidente de la citada federación ha señalado que "prácticamente todos" los productos que las distintas casas regionales han expuesto a lo largo de los tres días en los que se ha prolongado el IV Encuentro "se han vendido", si bien ha precisado que la intención de éstas, más que recaudar fondos era "darlos a conocer y probar a los visitantes esos productos".

Al hilo de ello, ha destacado el comportamiento de las casas regionales, que "se han volcado" con la organización del encuentro, si bien "se quedaron cortos en los preparativos", ya que "el mismo viernes —día de la inauguración— prácticamente se acabó todo" debido a la acogida que ha atraído este evento, y que la propia Federación Sevillana de Casas Regionales y Provinciales "no esperaba", según ha confesado Doménech.