Los concesionarios de la Comunitat Valenciana cerraron en pérdidas en el primer semestre del año, de forma que entre un 65 y un 75 por ciento de sus concesionarios cerraron en pérdidas, siendo Castellón, con un 75 por ciento de concesionarios, la provincia que más porcentaje ha registrado.

Así lo refleja el Informe Rentabilidad de las Redes de Distribución elaborado por Snap On Business Solutions para Ganvam, que además indica que un 65 por ciento de los concesionarios valencianos cerró en pérdidas el primer semestre del año y un 75 por ciento en Alicante.

Por áreas geográficas, el informe muestra cómo los concesionarios más afectados por la crisis se localizan, principalmente, en las provincias de Jaén, Sevilla, Huesca, así como en la ciudad autónoma de Melilla, donde todos registraron números rojos hasta junio.

Por el contrario, entre aquellas que acumularon menores pérdidas se encuentran Ávila -la mitad de su red obtuvo resultados negativos-, seguida de Murcia, Baleares, Albacete o Valladolid (56 por ciento).

Datos nacionales en el conjunto de España, la rentabilidad sobre facturación se situó en una reducción del 0,9 por ciento, debido, principalmente, al desplome de las matriculaciones y a la caída de la actividad de los talleres, De esta forma, los concesionarios españoles suman ya más de un año y medio en números rojos, aunque suavizan sus pérdidas con respecto al primer trimestre del año en el que se movieron en unos ratios de rentabilidad con una reducción del 1 por ciento.

No obstante, estas cifras son peores que las registradas en la primera mitad de 2011, con una bajada de la rentabilidad del del 0,8 por ciento.

Ganvam atribuye estos resultados al bajo volumen de ventas de vehículos nuevos que apenas superaron las 406.000 unidades hasta junio, con una caída del 8,2 por ciento, y a la atonía creciente del mercado de vehículos de ocasión que cerró el semestre con 777.788 coches vendidos, un 5,2 por ciento menos.

Según explica el presidente de la asociación, Juan Antonio Sánchez Torres, "con un mercado en caída libre es muy complicado para nuestros concesionarios mantener unos ingresos mínimos y, además, tener liquidez".

Por ello espera que, a pesar del alza del IVA, el nuevo Plan PIVE "surta sus efectos positivos cuanto antes y logre dar un respiro a las redes de aquí a final de año".