El portavoz de UGT en Renault, Leandro Martín, ha reconocido este martes que le gusta la música de un posible plan industrial de la multinacional francesa de la marca del rombo para sus plantas españolas pero ha admitido que a esa partitura habrá que ponerle la letra ante unas contraprestaciones "realmente duras".

De este modo se ha pronunciado Martín tras la reunión del Comité Intercentros de este martes en la que el presidente director general de Renault, José Vicente de los Mozos, ha planteado un nuevo Plan Industrial para las factorías españolas pero al que también optan otras del grupo, una propuesta "muy ambiciosa" que, de ponerse en marcha, "no sólo generaría récords de producción en las fábricas del grupo en España, sino que además se crearían 1.300 nuevos empleos directos", según la empresa.

En declaraciones a la agencia Europa Press, el sindicalista ha reconocido que "inicialmente" la propuesta de la empresa es "positiva" para todos los centros de trabajo de Renault en España "como no puede ser de otra manera" y ha resumido este sentimiento en el dicho de que la música suena bien, a falta de conocer la letra.

"Me suena como el Pacto por la Competitividad y el Empleo" que firmaron empresa y sindicatos en septiembre de 2009 para el periodo 2010-2013, ha precisado Martín, quien, no obstante, ha abogado por esperar a ver el desarrollo de esta propuesta, con especial atención a lo que supondrá en contraprestaciones para los trabajadores.

Martín ha asegurado que la empresa se ha limitado a enunciar algunas de las medidas necesarias para que las plantas españolas sean más competitivas sin dar más detalles por lo que ha preferido no opinar hasta conocer los pormenores en las próximas reuniones.

Dicho esto, ha admitido que lo primero que se ha puesto sobre la mesa hace referencia a medidas "realmente duras", si bien ha apelado a las reuniones negociadoras que se producirán en las próximas semanas para ver si se pueden "aliviar" las medidas y ver cómo se pueden sacar adelante.

"Estamos convencidos de la importancia del plan para las factorías españolas", ha sentenciado Martín para quien todas las negociaciones tienen unos topes para unos y otros a lo que ha sumado que aunque la intención de la empresa es que el posible acuerdo social esté cerrado antes del 9 de noviembre se podría dilatar en el tiempo.

En este sentido, ha descartado someterse a cualquier vorágine sobre el tiempo desde el convencimiento de que el sindicato tiene que consultar también con sus afiliados.