La Policía Nacional ha detenido a un hombre de 51 al ser sorprendido intentando entrar a mazazos en una vivienda de Granada capital que aseguraba que había sido de su propiedad. El piso, deshabitado, es ahora propiedad de otra persona y estaba calcinado por dentro.

Los fuertes golpes propinados con un mazo y un cincel alertaron a los vecinos del inmueble, quienes avisaron a la sala de coordinación del 091 informando de los hechos, ha informado la Policía en una nota.

Personados los agentes de Seguridad Ciudadana, se encontraron con el hombre golpeando e intentando derribar el marco de la vivienda, que alegó que había sido suya y que quería entrar en ella.

Realizadas ciertas gestiones por parte de los policías para la averiguación de la titularidad del domicilio, los agentes pudieron contactar con el propietario del inmueble, quien les manifestó que la Policía Local le había avisado esa misma mañana de que alguien habría entrado previamente en el piso, que no estaba habitado, y lo había calcinado.

El titular de la vivienda les manifestó que se había encontrado el marco de la puerta destrozado y la vivienda calcinada, valorando solamente el destrozo de la puerta en más 500 euros sin evaluar otros daños sufridos en la misma.

Ante estos hechos, los agentes procedieron a la detención del individuo poseedor del mazo y cincel, y a su traslado a dependencias policiales. Después fue puesto posteriormente a disposición Judicial.