Agentes de la Guardia Civil de Boiro (A Coruña) detuvieron el lunes a un vecino de la localidad de 21 años como presunto autor de un delito contra la salud pública, al serle intervenidas 17 plantas de marihuana que arrojaron un peso de 21,5 kilos y que tenía cultivadas en una finca anexa a la parte posterior de su domicilio, algunas de las cuales se encontraban protegidas bajo un invernadero.
Según informa el Instituto Armado, en la vivienda del joven los guardias practicaron un registro domiciliario y, además de las plantas, lograron incautarse de algo más de 2.000 euros en metálico, tres cuchillos con restos de corte de hachís, varias bolsitas con autocierre, tijeras de corte y numerosos cogollos secos dispuestos para su venta, con un peso de unos 300 gramos.
Los responsables de la investigación creen que este joven se dedicaba a la venta y distribución de sustancias estupefacientes en diversos locales de ocio y diversión de la zona de Boiro. El detenido ha sido puesto a disposición del Juzgado de Instrucción de Ribeira.
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