El Gobierno estadounidense ha lanzado una campaña para recabar apoyos entre sus aliados internacionales para pactar una estrategia común contra la prueba nuclear anunciada por Corea del Norte. El máximo negociador de EE UU en la crisis nuclear, el secretario de Estado adjunto, Christopher Hill, aseguró ayer que su país no permitirá que el régimen de Pyongyang tenga armas nucleares.El portavoz del Gobierno japonés, Yasuhisa Shiozaki, anunció que su país impondrá sus propias sanciones a Corea del Norte si hace la prueba nuclear. El subdirector general de la Agencia Internacional de la Energía Atómica (AIEA), Olli Heinonen, pidió a la comunidad internacional que presione a Corea del Norte para que vuelva al Tratado de No Proliferación Nuclear (TNP).