Cindy Lee Garcia, una de las actrices del vídeo que se burla de Mahoma y que ha provocado la ira de los musulmanes, ha presentado este miércoles una demanda contra el productor de la obra, Nakoula Basseley Nakoula (conocido como Sam Bacile), informó la edición digital de la revista The Hollywood Reporter.

En la demanda, la intérprete también ha incluido al portal de vídeos YouTube y a su empresa propietaria, Google, por haberse negado a retirar la obra La inocencia de los musulmanes. La actriz indicó que el vídeo contiene un uso no autorizado de su imagen.

García sostiene en la demanda que los productores mintieron acerca de sus intenciones a la hora de rodar el proyecto y les acusa de fraude, difamación y daño emocional.

La intérprete argumenta que ella acudió a un casting para una cinta llamada Desert Warrior, que se supone que era una aventura histórica en el desierto de Arabia.

Asimismo, apuntó que los productores ocultaron en todo momento el propósito y el contenido de la película, hasta el punto de que no mencionaron el nombre de Mahoma en momento alguno durante el rodaje ni tampoco hicieron alusión a contenidos sexuales, como aparecen finalmente.

García afirma que el resultado final fue "cambiado grotescamente" respecto a lo que ella pensaba que estaba filmando y fue modificado "para hacerlo pasar de forma que la señora García voluntariamente accedió a formar parte de una producción anti-islámica", según la demanda.

La actriz explicó que ha recibido amenazas de muerte a raíz de su aparición en el vídeo y que, en consecuencia, su propia familia no le permite ver más a sus nietos, a los que cuidaba de forma habitual.

Asimismo, indica que ha sido despedida de su trabajo debido a que sus jefes temían por su seguridad.

M. Cris Armenta, abogada de la actriz, recalcó que la demanda incluye a YouTube puesto que "este no es un problema relacionado con la Primera Enmienda -libertad de prensa-, sino que es una invasión de la privacidad".

Armenta comentó que García quiere "limpiar su nombre, retirar el contenido del portal y aclarar al mundo que ella no consintió que se usara su imagen de esa manera".

El vídeo, de tono entre satírico e insultante, que muestra supuestas escenas de la vida del profeta Mahoma, presentado como fruto de una relación ilegítima y practicando sexo con una mujer, ha generado una ola de violencia que ha provocado varias muertes, incluida la del embajador estadounidense en Libia.

Esta semana las protestas se extendieron hasta Australia y Pakistán.