Lleva 14 discos publicados de los que ha vendido más de 22 millones de copias y es por ello que cuando Alejandro Sanz saca un nuevo trabajo, tener muchas ventas no es su prioridad, sino que su mayor éxito es quedarse satisfecho con lo que hace.

"Me he esforzado mucho para hacer el disco y creo que es el mejor disco que podría hacer en este momento de mi vida y para mí ese es el mayor de los éxitos, poder quedarme moderadamente satisfecho", ha dicho el artista español en una conferencia de prensa en Ciudad de México.

Sanz eligió este país para su primer encuentro con la prensa antes de que el próximo 25 de septiembre salga a la venta su nuevo trabajo, La música no se toca.

"No voy a mentir, cuando uno saca un disco pretende que le llegue al mayor número de gente posible, que le guste a todo el mundo, uno lo que quiere es gustar, está claro, pero yo me siento muy satisfecho con lo que he hecho", añadió el cantante, de 43 años.

Tras tres años de silencio después de publicar Paraíso Express en 2009, presenta ahora un disco que, contó, tiene "muchos ingredientes": una parte de arreglo clásico "que es lo que le da esa cosa más contundente", mucho de pop, mucho de rock, una parte más acústica...

"Toda esta mezcla de cosas creo que hace que el resultado sea interesante", aseguró el cantante, que también ha elegido México, un país en el que compuso muchos de los temas de La música no se toca, para empezar su gira internacional.

Será la gira más extensa por este país de su carrera y comenzará el 10 octubre en Puebla para seguir en las siguientes ciudades: Ciudad de México (12 de octubre), Cancún (día 15), Mérida (16), Monterrey (19 y 20), Guadalajara (24 y 26) y San Luis Potosí (28 octubre).

Este país, contó, está bastante presente en su disco, gracias a la canción Camino a casa, en la que colabora el poeta indígena mexicano Mardonio Carballo, que le compuso un poema en el idioma prehispánico náhuatl para su disco.

"Gran parte de este disco se compuso aquí en México y era de justicia hacerle un homenaje a México y al náhuatl. Es una lengua que hay que proteger, que hay que ayudar y yo humildemente desde mi impostura quería hacerle ese pequeño homenaje", contó.

Por eso no duda en defenderlo cuando la gente habla de él como un lugar lleno de violencia que no se puede visitar.

"La violencia es un problema que existe, pero no existe tal y como la gente cree fuera de México, que provoca que les dé miedo venir. Yo les diría que no tengan miedo en venir, México es un país que tiene un problema de violencia, pero solo en determinadas áreas", aseguró.

Para crear la gira de La música no se toca, Sanz se ha guiado mucho de sus seguidores, a través de las redes sociales, una herramienta que utiliza mucho pero que le ha dado algunos momentos incómodos.

"Algunos artistas fuimos conejillos de indias en esto de las redes sociales y creíamos que eran casi como diarios; luego te vas dando cuenta de que hay ciertas cosas que no se deben hacer porque no benefician a nadie", apuntó.

Así, hace tiempo que algunas de sus opiniones se las guarda para sus amigos en lugar de publicarlas, contó el cantante, ganador de numerosos premios como 16 Grammy latinos y 3 americanos.

"Si no al final empiezas a formar parte de un ruido que existe en la sociedad, un ruido en el que todas las opiniones tienen cabida pero que muchas veces no sirven para nada, sino para crear más ruido", apuntó.

Se dio cuenta así de que el ruido que le gustaba era el de su estudio, el sonido de su guitarra, el silencio al componer canciones.

Este martes Alejandro Sanz lanzaba su segundo sencillo de La música no se toca, titulado Se vende.

Escucha en el vídeo bajo estas líneas el nuevo 'Se vende':