El presidente de Cantabria, Ignacio Diego, "espera" que Cantabria logre cumplir el objetivo de déficit para este año, fijado en el 1,5% del PIB regional, si bien ha aclarado que no hay "garantía absoluta ni aritmética" de que finalmente se conseguirá.
En su comparecencia en el Parlamento regional en el Pleno que inicia el curso político, sí ha garantizado que habrá por parte del Gobierno de Cantabria el "máximo esfuerzo" para lograr una reducción del déficit que, a su juicio, supone un "trabajo de Hércules".
Según ha señalado, sólo en el "camino" de reducción del déficit, que en su opinión es "irreversible", "la autonomía de Cantabria volverá a ser viable" ya que salirse de él puede suponer —ha advertido— perderla o entrar en suspensión de pagos, o ambas cosas a la vez.
Diego ha vuelto a reconocer que las medidas adoptadas son "extremadamente incómodas" pero "absolutamente necesarias" si Cantabria no quiere "que el edificio se venga abajo". Además, ha asegurado que son "perfectamente reversibles cuando se logre estabilizar la economía".
El presidente regional ha explicado que algunas de las medidas aprobadas serán "efectivas" y estarán operativas "al 100 por 100" en 2013.
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