El Ayuntamiento de Vitoria ha anunciado la aplicación de una serie de medidas de "calmado de tráfico" para solucionar los problemas de convivencia existentes entre peatones, ciclistas y vehículos. Entre las iniciativas destaca la de limitar a 30 kilómetros por hora la velocidad máxima en 45 calles de la ciudad, con el objetivo de que los ciclistas puedan circular por ellas con seguridad.

El Plan de Movilidad Sostenible define cuáles son las vías donde hay que compatibilizar la circulación de vehículos y bicicletas, y el Consistorio aplicará esta directriz en 45 calles de la ciudad, según ha informado el alcalde, Javier Maroto, en una rueda de prensa.

Las medidas, que se llevarán a cabo en las 17 manzanas centrales que rodean el Casco Medieval, corresponden al pintado, la señalización y la colocación de un asfalto fundido impreso y coloreado en relieve de dos centímetros. Este tipo de suelo servirá para advertir al conductor del vehículo que ingresa en una zona especial por la que también circulan ciclistas.

Las calles tendrán un límite de velocidad de 30 kilómetros por hora para los vehículos y serán compatibles con la red principal de bidegorris. Algunas de ellas son Fueros, Olaguíbel, Postas, Pío XII, Jesús Guridi, Canciller Ayala, Juan XIII, Isaac Albéniz, Francia, Libertad, Portal de Arriaga, Cercas Bajas, Beato Tomás de Zumárraga, Eulogio Serdán, Koldo Mitxelena, Bizenta Mogel o Madre Vedruna.

La iniciativa, según ha asegurado Maroto, no conllevará la pérdida de plazas de aparcamiento. Las actuaciones cuentan con un presupuesto de 300.000 euros y se enmarcan dentro del Proyecto Civitas, que subvenciona el 30 por ciento de las mismas.