El camionero de 32 años que asesinó el lunes a cinco niñas en un colegio rural de la comunidad amish, cerca de Filadelfia, reveló a su mujer antes de que ocurrieran los hechos que había abusado sexualmente de varias menores de su familia hace veinte años.

Además, decía estar  "enfadado con Dios" por la muerte de una hija que nació prematuramente.

Esto último  es lo que se desprende de unas "confusas" notas suicidas que su mujer, quien le describe como "un marido cariñoso, compasivo y considerado", encontró en casa el día de la tragedia.

Ya era demasiado tarde. Según ha contado la cadena de televisión norteamericana CNN, Charles Carl Roberts, de 32 años, tuvo una última conversación telefónica con su mujer antes de quitarse la vida, llevándose a cinco niñas por delante.

"No voy a volver a casa", le dijo. Y así fue.

Planeado meticulosamente

Según las autoridades,  propio Roberts dijo a su mujer que estaba cumpliendo una venganza que llevaba planeando desde hacía 20 años

Lo que sí que queda claro es que Roberts lo tenía todo planeado meticulosamente.

Esa mañana cargó una furgoneta alquilada con varias armas y cuchillos, además de una soga de plástico, la que le sirvió para atar a sus víctimas ,y luego dispararles.

Cinco niñas fallecidas

La muerte la pasada madrugada de una de las niñas heridas en el ataque eleva a cinco el número de escolares fallecidas en este suceso, informó la policía.

La niña, que murió en un hospital de Delaware, fue una de las siete heridas ayer cuando Charles Carl Roberts atacó armado la citada escuela ubicada en un área rural de Pensilvania .

El atacante mató a tres niñas, hirió gravemente a siete y, posteriormente, se suicidó.