La experta asociada del Centro de Patrimonio Mundial UNESCO, Maider Maraña, ha criticado este miércoles en Santander que los derechos culturales sean "en pleno siglo XXI" una categoría "descuidada, difusa y desatendida". "Seguimos sin saber de qué estamos hablando", apuntó.

Así, recordó que si el sistema de Derechos Humanos empezó en 1948, hasta el año 2009 no ha habido "ningún proceso específico" en cuestión de derechos culturales. Esto se debe, según argumentó, a que "arrastra los mismos problemas que la cultura", que es una "palabra maleta" que puede significar todo y sin embargo "no aplicar nada".

"Me hace mucha gracia que en España se diga que los derechos culturales son una cuestión sensible y, sin embargo, la libertad de culto esté totalmente regulada", comentó la experta.

El término cultura ha sido "tan analizado" que ha sufrido una "sobrexplotación", lamentó Maraña en una mesa redonda en el marco del encuentro 'Comunicación para el cambio social y el desarrollo' en la Universidad Internacional Menéndez Pelayo (UIMP), en la que también participó el coordinador del área de Educación, Comunicación y Cultura para el desarrollo de CiC Batá, Rafael Cantero.

En la misma línea, la experta de la UNESCO hizo hincapié en que la cultura se sigue viendo como una cuestión "que no tiene que ver con el desarrollo", y la definió como un "proceso continuo, maleable y evolutivo" y no como un "conjunto estático de valores y prácticas", que es "como se tiende a entender".

Maraña explicó que en la UNESCO trabajan desde hace unos años con el término "libertad cultural" que implica "justicia social y la posibilidad de elegir", frente a la "diversidad cultural", que es "una realidad que existe".

También se refirió a la comunicación en el ámbito de la cultura, la cooperación y el desarrollo, e hizo una autocrítica. "En las organizaciones nos hemos olvidado de que comunicación y comunidad tienen la misma raíz, que es participar entre varios", afirmó.

En la misma línea se manifestó Cantero, que insistió en que para que se de una "diversidad cultural" es "fundamental" una estrategia de comunicación "transversal" y "nunca" se puede entender este proceso como una técnica de "promoción". Así, alertó de que en la actualidad se está produciendo una "estandarización de los medios" que supone "una amenaza".

"¿Existe una variedad de contenidos o estamos recibiendo la mismo información?", se preguntó el coordinador del área de Educación, Comunicación y Cultura para el desarrollo de CiC Batá, quien recordó que "se pueden hacer políticas de comunicación que promulguen la diversidad cultural".

Para Cantero, se tienen que construir fundamentos y trabajar en el derecho de la comunicación, que es "el gran déficit" que tiene España, y puso como ejemplo el caso de Argentina, donde existe una política clara al respecto.