Hollywood entra en campaña: los actores como arma política

  • Las estrellas de cine pueden ser decisivas en la carrera hacia la Casa Blanca: repasamos quiénes apoyan a Barack Obama y quiénes a Romney.
  • Scarlett contra Clint Eastwood. George Clooney frente a Chuck Norris... cada candidato busca hacerse con el apoyo moral de un famoso actor.
Scarlett Johansson, haciendo campaña a favor de Barack Obama.
Scarlett Johansson, haciendo campaña a favor de Barack Obama.
GTRES
Scarlett Johansson, haciendo campaña a favor de Barack Obama.

El 25 de mayo, George Clooney reunió en su mansión de Los Ángeles a Julia Roberts, Reese Witherspoon, Barbra Streisand, Robert Downey Jr., Billy Crystal, Salma Hayek, Tobey Maguire... La larga ristra de estrellas no fue solo para degustar manjares: el postre era el presidente de EE UU, Barack Obama, que también acudió a la cita. Y no le fue mal: solo esa noche, Obama recaudó casi 12 millones de euros para su campaña electoral.

Así es la política estadounidense, un gigantesco teatro en el que, además de promesas, críticas y profecías apocalípticas (si el vencedor es el rival), también se presume de apoyos artísticos y económicos. El incondicional apoyo de Hollywood fue decisivo para que, en 2008, Obama se convirtiera en el primer presidente negro de EE UU. Este año, en la que se prevé una reñida pelea con el republicano Mitt Romney, Obama y familia han tenido que redoblar esfuerzos.

Michelle Obama, por ejemplo, asistió a un desayuno organizado por la actriz Jennifer Garner: cada asistente pagó entre 800 y 20.000 euros por compartir café con la primera dama. Whoopi Goldberg protagonizó en septiembre una función especial en Broadway de Sister Act. Cada asiento, que costaba 8.000 euros, incluía una foto al final del espectáculo con Obama.

Hasta Antonio Banderas está intentando ayudar al todavía presidente: el malagueño y su esposa, Melanie Griffith, organizaron una fiesta latina en su mansión, donde Eva Longoria, otra firme admiradora del demócrata, estuvo presente: la entrada más cara valía 28.000 euros.

Sin embargo, las cosas pintan peor este año para el candidato demócrata. Su gestión a lo largo de estos cuatro años en el poder no solo ha decepcionado a millones de estadounidenses comunes,  pues hasta Matt Damon, una de las estrellas que lo apoyó con más fuerza en el pasado, ha asegurado que Obama "ha desperdiciado su mandato". Y no solo eso: además de escucharse menos gritos de apoyo (aunque Scarlett Johansson, por ejemplo, estuvo muy entusiasta en la convención demócrata de hace cinco días), algunos históricos han hecho públicas sus preferencias por su rival, el republicano Mitt Romney.

Sillas vacías y socialismo

Es cierto: Romney no recauda tanto dinero en Hollywood como Obama, pero sí apoyo moral. El 31 de agosto, el veterano Clint Eastwood se convirtió en el gran protagonista de la convención republicana, tras hablarle con dureza durante un cuarto de hora a una silla vacía en la que, se suponía, debería haber estado sentado Barack Obama.

Eastwood, que entre 1986 y 1988 fue alcalde de una ciudad llamada Carmel, apoyó en el pasado a los republicanos Richard Nixon o Ronald Reagan (por cierto: un actor que entre 1980 y 1988 se convirtió en uno de los más populares presidentes de la historia), y ahora vuelve a intentarlo con Romney.

No es el único: el legendario Chuck Norris (ha considerado a Romney "el único capaz de derrotar a Obama, y detener así la transformación de América") y John Voight también se han posicionado. Protagonista de Cowboy de medianoche o El regreso, Voight incluso dijo que "Romney es fuerte y honesto, y Obama no lo es". Pero lo más grave vino después: "Obama está decidido a seguir los pasos de su padre", afirmó, "y llevarnos hacia el socialismo". Una acusación muy fuerte en un país en el que socialista y comunista son un insulto.

Artistas y políticos en España

Almodóvar: Durante años apoyó al PSOE, pero su decepción con el último Gobierno de Zapatero lo llevó a firmar un manifiesto, con Antonio Banderas, de apoyo a ICV-EUiA en Cataluña.

Alfredo Landa: En una entrevista para El País lo acusaron de ser "un poco fachilla". "¿A qué le llama usted fachilla?", preguntó a su vez. "Soy de derechas, y uno puede ser de derechas y no facha".

Arturo Fernández: El actor apoyó al PP antes de las últimas elecciones.  "España nunca ha prosperado tanto como en la época de Aznar", explicaba, "y en España todos los partidos de izquierdas han fracasado".

Norma Duval: La vedette fue una de las más conocidas musas del PP. Sin embargo, en 2011 anunció que no tenía orientación política, y que apoyar a los populares le había "hecho perder muchos proyectos".

Agustín Díaz Yanes: El autor de Nadie hablará de nosotras cuando hayamos muerto fue uno de los pocos cineastas que seguían apoyando al PSOE en las últimas elecciones. En este caso, había motivos personales: Yanes es amigo íntimo de Rubalcaba.

Lourdes Hernández: La líder de Russian Red dijo, en una entrevista en Marie Claire, que era "de derechas". Fue muy polémico, y desde entonces ha preferido no tocar demasiado el asunto.

Mostrar comentarios

Códigos Descuento