El presidente del Instituto Municipal de Cultura (IMC) de Burgos, Fernando Gómez, ha defendido este martes la externalización de la gestión del Centro de Recepción de Turistas (Citur) de la ciudad, tras la amortización de los puestos de trabajo acometida el uno de septiembre.

"Hemos intentado una mejora de la atención al turista", ha señalado Gómez en declaraciones recogidas por Europa Press, antes de añadir que "no se han destruido puestos de trabajo, sino que se han cambiando las caras".

En este sentido, ha destacado la importancia de mejorar la cualificación del personal contratado, con el objetivo de favorecer la proyección exterior de la ciudad y consolidarla como una destino turístico "apetecible".

La externalización de la gestión de Citur se enmarca dentro de un proceso de reformas, puestas en marcha por el equipo de Gobierno local, encaminadas a la optimización y calidad de los recursos.

La actual gestión de las instalaciones, ubicadas junto a la Catedral de Santa María, ha sido contratada tras la publicación de un concurso negociado para la externalización, que quedó desierto por las "altas exigencias" del mismo.

Por ese motivo, desde el IMC se trabaja ahora en un nuevo pliego de condiciones, que rebaje las exigencias planteadas en el primer concurso, con el fin de poder adjudicar el contrato por un periodo de un año.