La central nacionalista CIG se muestra partidaria de mantener la unidad con CC.OO. y UGT, por lo que apuesta ahora por esperar para la convocatoria de una huelga general, que la organización aplaza hasta noviembre como eventual fecha "de referencia".

Aunque la idea inicial de la CIG situaba el paro general el 26 de septiembre, las negociaciones con los sindicatos de ámbito estatal en las últimas semanas no han fructificado y han supuesto un cambio de rumbo en la agenda de la central nacionalista.

Así las cosas, la reunión prevista para este jueves con responsables de organización de CC.OO. y UGT para analizar una eventual convocatoria ha sido suspendida "hasta después del día 10", informa a Europa Press el secretario xeral de la CIG, Suso Seixo.

"CC.OO. y UGT consideran que en este momento no era oportuno y prefieren esperar a después del día 10", explica Seixo, quien revela que, durante la reunión de la Executiva Confederal de la central nacionalista, celebrada este mismo jueves, el sentir mayoritario ha sido el de no optar por "la ruptura" con el resto de sindicatos y "esperar".

Así las cosas, el próximo lunes, día 10, la CIG reunirá a su Secretariado Confederal, foro al que trasladará la nueva situación y en el que "se tomarán decisiones". Dicha decisión será anunciada el día después, el martes 11, en la Asamblea Nacional de Delegados, al término de la cual se producirá una manifestación de delegados sindicales.

"mala interpretación" por las elecciones

Aunque Seixo ha evitado anticipar decisiones hasta entonces, sí ha destacado que la Executiva Confederal ha visto este jueves "complicado meterse solos en la huelga general", postura que comunicará al secretariado, en el que se integran las comarcas y federaciones de la central sindical.

"Lanzarse solos con elecciones autonómicas convocadas a la vuelta de la esquina puede generar una mal interpretación, por si queremos colaborar con alguna de las organizaciones que se presentan", ha argumentado.

Y, en esta línea, justifica que "si fuesen las 3" organizaciones —CIG, CC.OO. y UGT— las que convocasen, la fecha que los nacionalistas consideran "adecuada" sería la del 26 de septiembre, para la que se barajaba la huelga general —y día en que ya se convocó por centrales nacionalistas en País Vasco—. "Por lo que está pasando y lo que previsiblemente se anunciará en los próximos días", enfatiza Suso Seixo.

Pero, dadas las circunstancias, el responsable de la CIG apela a la unidad y al resultado de movilizaciones conjuntas como las celebradas el pasado 19 de julio. "No queremos abrir una apertura", resalta, por lo que aboga por "esperar y poner fechas de referencia".

A este respecto, apunta al mes de noviembre como "previsión" de CC.OO. y UGT para una futura convocatoria de huelga general. "Nos parece un poco tarde, pero en cualquier caso sería absurdo ir nosotros el 26 y después que se produjese un anuncio de ellos", incide: "inicialmente en la ejecutiva nos pareció oportuno esperar", puntualiza.