El veterinario de la Junta de Castilla y León acusado de un delito continuado de estafa cometido en 2004 sobre un matrimonio de Traspinedo (Valladolid), propietario de una explotación de terneros al que la empresa madrileña Baycon Alimentación S.L. adeuda 67.500 euros por el suministro de una partida de chotos que resultó impagada, ha clamado hoy por su inocencia tras asegurar que actuó como mero "intermediario" de la operación, sin siquiera tomar la iniciativa de la misma y sin que llegara a cobrar de la mercantil la comisión pactada por cada kilo de canal vendida.

En su declaración en la primera jornada del juicio iniciado en la Audiencia de Valladolid, que prosigue el próximo lunes, Jesús de S.B, quien comparte banquillo con los que fueran administradores de Baycon Alimentación S.L, José Ramón P.M. y Manuel L.P, estos últimos en calidad de coautores, expuestos todos ellos a penas de entre tres años y tres años y nueve meses de prisión, ha relatado que él se limitó a hacer confluir la demanda de terneros que le hizo llegar dicha sociedad a través del segundo de los acusados y la oferta de la que le hizo partícipe el propietario de la explotación de Traspinedo por medio de un conocido de ambos.

"Puedo decir que era una empresa seria porque cuando me propusieron colaborar con ellos hice las oportunas averiguaciones bancarias y comprobé que contaba con instalaciones en Mercamadrid", ha explicado Jesús de S.B, de ahí que entonces pusiera en contacto a las partes y se conviniera el precio a pagar, tras lo cual, según ha apostillado, su papel concluyó en ese momento, sin haber percibido hasta ahora sus honorarios pactados como corredor de la operación.

Fue a posteriori cuando fue informado por el matrimonio de ganaderos que Baycon Alimentación S.L. tan sólo había abonado el primer pagaré por la mercancía y que el resto habían sido devueltos por falta de fondos, ante lo cual accedió a mediar de nuevo para solventar la situación y llegó a participar en distintas reuniones celebradas en Segovia y Valladolid. "Como el resultado no había sido bueno me vi obligado a colaborar para salvaguardar mi credibilidad", ha justificado el veterinario.

Por su parte, el que fuera administrador de Baycon Alimentación a partir de junio de 2004, J.R.P.M, ha corroborado el testimonio del anterior y se ha declarado autor material de la operación de compra de ganado al matrimonio de Traspinedo que, como así ha apuntado, realizó con el fin de relanzar a la empresa al comprobar nada más hacerse cargo de ella que no atravesaba por su mejor momento debido a varios impagos de clientes. Y es en ese marco, con una sociedad en "situación crítica", en el que ha contextualizado la imposibilidad de afrontar los pagarés correspondientes a las distintas partidas de ganado adquiridas a la pareja compuesta por S.G.B. y M.V.E.S.

Sin embargo, el acusado ha asegurado que su intención fue siempre la de abonar el genero adquirido e incluso ha explicado que en las reuniones posteriores con los afectados llegó a pagarles en metálico 6.000 euros y otros 4.000 mediante un pagaré, además de pactar que el resto de la deuda se iría liquidando mediante pagos semanales de 2.000 y 3.000 euros, sin llegar a saldar la totalidad al hacer acto de aparición, según ha denunciado, los cobradores del frac y sus amenazas. "Me dijeron que me olvidara del matrimonio porque la deuda la tenía con ellos", ha concluido.

"has dicho muchas mentiras"

Su predecesor en el cargo, M.L.P, también acusado, se ha desmarcado totalmente de los hechos y aunque éstos se produjeron cuando él era aún administrador único, en concreto un mes antes de ser relevado por J.R.P.M, ha justificado la aparición de su firma en los pagarés impagados en el hecho de que su sucesor se valiera de cuatro de estos cheques que había firmado en blanco y había dejado olvidados en un cajón de la oficina.

"¡Has dicho muchas mentiras José Ramón, me dijiste que habías roto los pagarés y ahora me veo aquí sentado!", ha espetado Manuel a su compañero de banquillo, a quien también ha reprochado por decir que la empresa que recibió de él atravesaba por una grave falta de liquidez, "cuando no tenía deudas y afrontaba puntualmente sus obligaciones con los clientes".

En el lado opuesto, el matrimonio ha situado como principales artífices de la estafa a Jesús de S.B, con quien el primero de ellos cerró la operación de venta del ganado, y a J.R.P.M, al tiempo que ha censurado el comportamiento del veterinario cuando el matrimonio se personó en su oficina de la Junta para pedirle explicaciones por los impagos.

"En su momento me dijo que no me preocupara porque su empresa era Baycon Alimentación y aseguró que ésta pagaba", ha recordado Samuel, mientras que su esposa recuerda aún ofendida cómo el acusado les trató como si fueran "auténticos gusanos" cuando se personaron en su puesto de trabajo para reclamarle la deuda.

Además, la pareja, a diferencia de lo afirmado por J.R.P.M, niega haber recibido dinero en metálico ni pagaré alguno de manos del entonces administrador de la mercantil madrileña, tan sólo el primer cheque que, a diferencia del resto, el banco no devolvió por falta de fondos.