La Asociación Agraria de Jóvenes Agricultores (Asaja) ha criticado que el Plan de Conservación y Gestión del lobo en Castilla y León permita a éste avanzar a su "libre albedrío" sin que se apruebe la normativa que permite depositar cadáveres de animales en diversos espacios para que sirvan de alimento a la fauna.

La Asociación ha explicado, en un comunicado recogido por Europa Press, que los datos oficiales disponibles apuntan a un incremento de las manadas de lobos, algo que han definido como una prueba de la "escasa" eficacia de las medidas adoptadas hasta el momento por la Administración.

Este miércoles, 5 de septiembre, los representantes de la organización agraria acudirán al Comité Técnico de Seguimiento del Plan de Conservación y Gestión del lobo en Castilla y León, ya que afirman que "una vez más, la realidad es tozuda y confirma la imposible convivencia de la ganadería de extensivo con el lobo".

Las estadísticas oficiales apuntan que en 2011 se sumaron al menos diez manadas nuevas de lobos, principalmente en León y Palencia. Por otra parte, las provincias que cuentan con más manadas son León, con 43, detrás va Zamora con 30, seguida de Palencia con 27 y finalmente Burgos con 17.

En cuanto a los ataques, en 2011 han despuntado los que tienen como víctimas al ganado ovino, con 1.934 cabezas perdidas, y otras 454 de ganado mayor. Fuera de estadística están también los crecientes ataques al porcino de extensivo, que no se contabilizan porque estos animales están excluidos del seguro, algo que "debe corregirse".

Ataques sin denunciar

En total se contabilizaron 774 ataques en 2011, aunque Asaja calcula que "al menos son el doble" puesto que muchos de ellos no son denunciados por los ganaderos por el "engorro" burocrático y las escasas posibilidades de que los daños sean reconocidos y compensados.

Una de las reclamaciones que la Asociación efectuará este miércoles será que la administración habilite mecanismos de compensación que cubran el ganado perdido y el lucro cesante de la explotación, para lo que deberían pagarse como daños patrimoniales en lugar de a través de un seguro, según ha explicado Asaja.

Por último, la organización también pedirá a la administración regional la "máxima celeridad" para aprobar la normativa que permita habilitar de nuevo muladares y espacios controlados en las explotaciones de extensivo donde se puedan depositar cadáveres de ganado.