Alrededor de un centenar de vecinos se ha encerrado este jueves en el ambulatorio del municipio sevillano de Casariche para exigir un médico 24 horas y una sanidad "digna", ya que aseguran que las ambulancias tardan alrededor de una hora y media en llegar.

Según explica el portavoz de la Plataforma Médico 24 horas en Casariche, Eladio Lozano, alrededor de las 13,00 horas se ha ocupado el centro sanitario, en una acción "simbólica y pacífica", y será abandonado este viernes a primera hora de la mañana. Así, explica que el martes se expuso en una asamblea a los vecinos las razones del encierro, algo de lo que "los ciudadanos son muy conscientes de que es una necesidad que hay que defender".

"Hasta hora y media tardan en llegar las ambulancias y hemos hecho un llamamiento para que los vecinos cuando ocurren estas cosas hagan las reclamaciones y quejas de forma oficial para que quede constancia", agrega, tras subrayar que la acción ha sido seguida por muchos ciudadanos.

Así, cabe recordar que vecinos de la Sierra Sur, constituidos en diferentes plataformas ciudadanas en distintos municipios sevillanos, han convocado este nuevo encierro, que sigue la estela del que se llevó a cabo en Badolatosa el día 23 de agosto, y tras la que se pondrá en marcha otra el próximo jueves en La Roda de Andalucía.

La portavoz de la Plataforma 'Badolatosa y Corcoya por un equipo médico 24 horas ¡ya!', María del Carmen Romero, explica a Europa Press que los vecinos de la Sierra Sur continuarán moviéndose para "evitar más muertes" y apuntan al desarrollo de sendas reuniones con el Sindicatos Andaluz de Médicos a mediados de septiembre y con responsables del Servicio Andaluz de Salud (SAS) para analizar la organización de la atención básica y las urgencias.

"La gente se muere en el camino esperando la ambulancia porque la sanidad falla en nuestros pueblos", recalca. Este colectivo ha llevado ya a cabo recogidas de firmas, manifestaciones, concentraciones y encierros para conseguir un médico las 24 horas, además de recurrir al Defensor del Ciudadano y ahora esperan que los diputados lleven su problema al Parlamento de Andalucía. "No lo hacemos por gusto, sino porque no tenemos más remedio porque los vecinos están muriendo con estas condiciones", sentencia.