La pastelería Soles de Gredos, ubicada en la localidad abulense de Hoyocasero, lanzará al mercado el próximo invierno unas 'roscas de arrelobo', 'nevaditos', 'paladares', 'mantecadas de canela' y 'cocos' con el principal objetivo de ampliar su catálogo de productos de pastas y recuperar recetas artesanas, especialmente de esta zona de la provincia de Ávila.

Así lo ha explicado a la agencia Europa Press el propietario de la pastelería Soles de Gredos, Marcos López, que ha hecho especial hincapié en la importancia de rescatar recetas antiguas de la zona, como es el caso de las 'roscas de arrelobo', una especie de rosquilla elaborada con vino que se consumía en el almuerzo principalmente en primavera coincidiendo con el trabajo en los cotos de pesca.

El pastelero trabaja en estos momentos en la fase de pruebas para sacar al mercado estas nuevas pastas para lo que está consultando recetas con los propios vecinos del pueblo que, según ha confesado, hasta se acercan a su establecimiento para recordar el modo de elaboración de algunos de los productos típicos de la zona.

Aunque, en el caso de la 'rosca de arrelobo' su consumo era más típico en primavera, el propietario de Soles de Gredos ha preferido sacar al mercado sus nuevos productos en invierno para preservar la calidad de la masa, más favorecida por las bajas temperaturas del invierno y de esta zona concreta de Ávila.

Los 'nevaditos' son unos mantecados cremosos con bastante avellana "más populares" en otros lugares del país, mientras que los 'paladares' son una pasta muy fina de mantequilla con almendra laminada. Por su parte, las 'mantecadas de canela' son mantecados muy similares a los polvorones que en lugar de frutos secos llevan canela mientras que los 'cocos' son pastitas de merengue y coco rayado.

Tanto las 'roscas de arrelobo' como el resto de los nuevos productos se sumarán al catálogo de pastas elaborado por Soles de Gredos al amparo de la marca de calidad Tierra de Sabor. En concreto, en estos momentos la pastelería ofrece a sus clientes bollos de aceite y anís, el producto "más típico" de la zona; mantecados de almendra, rosquillas nevadas, pastas de palote y de té y hojaldritos de vino, además de los típicos polvorones de la etapa navideña.

Además de en la pastelería de Hoyocasero, estas pastas se venden en toda la provincia de Ávila y en Toledo y en tiendas y grandes superficies de Valladolid y Salamanca, como El Corte Inglés, a través de la plataforma de la Asociación de Artesanos Alimentarios de Castilla y León. También se han sumado recientemente las denominadas 'tiendas verdes' de El Lago de Sanabria, en Zamora, y de Segovia.

Negociaciones para ampliar mercado

Según ha explicado Marcos López, en estos momentos está en negociación para llevar estos productos amparados por el 'corazón amarillo' a tiendas delicatessen del País Vasco e incluso de Barcelona, si bien ha admitido que los rigores de la crisis y las dificultades de cobro están retrasando estas posibilidades de abrir mercado.

La pastelería Soles de Gredos es una pequeña empresa familiar que ha alcanzado ya la tercera generación y que nació en el año 1928 de la mano del abuelo del actual propietario, Emiliano Jiménez, especializado entonces en la elaboración de los tradicionales bizcochos de canela y de soletilla a los que sumó después los mantecados.

Sin embargo el padre de Marcos López y él mismo apostaron por la pastelería para lo que se formaron en Madrid y en otras zonas de España, como León o Alicante, con el objetivo de conocer otras formas de trabajar en repostería, más allá de las típicas recetas de la zona. Este conocimiento ha permitido al pastelero abulense elaborar también pasteles, tartas y bizcochos que produce sólo los fines de semana para su venta directa en tienda.

Toda la elaboración de los productos corre a cargo de Marcos López y de su madre que se encargan tanto de las recetas como del envasado y estuchado de las pastas, de las que han llegado a hacer entre 7.000 y 8.000 cajas de 400 gramos al año. "Me gustaría superarlo", ha asegurado el pastelero, que ha admitido no obstante que estos tiempos son "difíciles" por lo que se conformaría con mantenerse en las actuales cifras.

En la actualidad, la Pastelería Soles de Gredos está amparada por Tierra de Sabor y por la marca de garantía Ávila Auténtica que ha concedido a esta empresa la categoría "calidad de oro", unas distinciones que, según ha reconocido López, sirven para diferenciar los productos artesanos de los de elaboración en fábrica y garantizar la calidad y procedencia de las materias primas, que tienen que ser "cien por cien naturales".

En el caso de Soles de Gredos, la mayor parte de la materia prima que utiliza procede de Castilla y León, como es el caso de la manteca, que llega desde Guijuelo (Salamanca); el azúcar, de Valladolid, o la mantequilla, que es servida desde Soria o Burgos.