Los actores Justin Timberlake y Jessica Biel han conseguido dar esquinazo a los paparazzis para celebrar su boda en la más absoluta intimidad. Se comprometieron en Navidad y dijeron que todavía no tenían nada preparado, pero resulta que todo era producto de una estrategia de despiste.

Hace pocas semanas, la actriz declaraba que desde su compromiso y a causa del trabajo le había sido prácticamente imposible preparar nada para su enlace con Justin Timberlake. Sin embargo, la organización de su boda estaba guardada bajo secreto de sumario.

Según informa el diario británico The Sun, la pareja ha pasado por la vicaría este fin de semana y en secreto. Justin Timberlake y Jessica Biel por fin se han dado el 'sí, quiero' y por lo visto lo han hecho en un lugar muy especial para ellos, el mismo sitio donde el cantante se declaró a la actriz: la estación de esquí de Jackson Hole, en Wyoming (EE UU).

Todo ha transcurrido en la más absoluta intimidad, cumpliéndose el objetivo de que nadie consiguiera saber que la pareja se iba a convertir en marido y mujer este fin de semana.

La ceremonia fue muy sencilla e íntima, aunque a través de este diario se ha podido conocer que la famosa pastelera Sylvia Weinstock ha sido la artífice de su tarta nupcial.