Pasadas las 13.00 horas de este lunes, los representantes de los sindicatos CCOO, UGT y STAS-Intersindical hacían su entrada en la sede de Administraciones Públicas, donde el director de la Función Pública, José Manuel de la Fuente, ha convocado una Mesa Sectorial en la que se abordará una modificación de Relación de Puestos de Trabajo (RTP), que según los sindicatos supondrá la extinción de unos 700 puestos de trabajo de personal interno.

Media hora antes de comenzar la Mesa Sectorial más de 200 empleados públicos se han concentrado ante el edificio de Administraciones Públicas, sito en la Avenida de Portugal, para mostrar su rechazo a estas modificaciones, pidiendo la dimisión del consejero del ramo y portavoz del Gobierno, Leandro Esteban.

Con carteles donde podían leerse insignias como"Se vende la Junta", "Leandro Dimisión" o "Defiende lo tuyo" y pitando y haciendo sonar cacerolas en todo momento, los manifestantes han llegado a cortar parcialmente el tráfico en la Avenida de Portugal, en las inmediaciones de este edificio.

Antes de que los representantes de los trabajadores entraran en la sede de la Consejería, cuya puerta estaba custodiada por efectivos de la Policía Nacional, se han dirigido con un megáfono a los empleados públicos que se estaban concentrados asegurando que hasta que el Gobierno de María Dolores de Cospedal "no decida sentarse a negociar de verdad" no se van a levantar de la mesa.

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Los tribunales

El representantes de STAS-Intersindical, Gustavo Fabra, ha manifestado que en la Mesa van a exigir "que la Administración negocie puesto por puesto", ya que no van a permitir "una negociación de cinco segundos por cese". "Esta Mesa está basada en un fraude de ley y la vamos a llevar a los tribunales en caso de que no se retire la orden y se inicie una negociación con la plantilla sin despidos sobre la mesa".

Por su parte, la representante de CCOO, Carmen López, ha subrayado que "no se recuerda un despido de empleados públicos como el que se está dando en Castilla-La Mancha; no hay motivo ni razones para despedir a casi 700 personas, no conocemos las causas económicas que el Gobierno esgrime".

Por último, el sindicalista de UGT, Miguel Guerra, ha declarado antes los medios que "se va a producir un deterioro de los servicios públicos, puesto que no obedece a ningún criterio técnico".

"La política de personal es totalmente errática, espero que en la Mesa les hagamos entrar en razón, cosa que dudo porque esta gente no ha entrado en razón en ninguna de las mesas que hemos tenido hasta ahora", ha sentenciado.