La Policía Nacional ha detenido y puesto a disposición judicial a un hombre de 42 años, de origen magrebí, con antecedentes policiales, acusado de la presunta autoría de un episodio de amenazas graves contra una mujer, de 41 años, a la que amenazó con arrojar ácido en la cara.
Los hechos ocurrieron en una vivienda céntrica de la ciudad, en la que residían el presunto agresor y la víctima, según informa en un comunicado el Cuerpo Nacional de Policía.
Una llamada informaba al 091 de que en una vivienda, al parecer alquilada por habitaciones, se estaban escuchando grandes voces y amenazas. Según manifestaciones de la víctima, sin conocer la causa, el vecino de una habitación contigua, comenzó a golpear de forma violenta la puerta de la habitación colindante, ocupada por la víctima, profiriendo grandes gritos y vertiendo amenazas contra la vida e integridad de la mujer, llegando a decir que la iba "a echar ácido por la cara y a desfigurársela".
En esos momentos la víctima salió de su habitación para saber qué estaba pasando y conocer las causas de esa situación, así como para intentar calmar al su vecino y compañero de piso, quien entre las manos llevaba un cuchillo de cocina de grandes dimensiones y una bolsa conteniendo un líquido de origen desconocido en su interior.
Lejos de calmarse, el individuo intentó golpear en la cara a la mujer, lo que no consiguió por la rápida reacción de esta, que se introdujo de nuevo en la habitación mientras seguían los insultos y amenazas del individuo.
Ante esto, la mujer llamó por teléfono a su novio para que acudiese a la vivienda debido al cariz que estaban tomando los acontecimientos. Cuando éste llegó a la vivienda, pudo convencer al presunto agresor para que depusiese su actitud y saliese a la calle, momento en el que llegaron dos dotaciones policiales que habían sido avisadas telefónicamente momentos antes.
Informados de la situación, los agentes encontraron en la vivienda el cuchillo y una bolsa que contenía un líquido desconocido, al parecer con los que el que el presunto agresor amenazó a la víctima. Ante estos hechos, y por las manifestaciones de víctima y testigos, los policías procedieron a la detención del individuo. Además, unos y otros, comentaron a los agentes que el detenido había estado consumiendo droga y esnifando pegamento durante las horas previas a los hechos.
El hombre fue trasladado a dependencias policiales y puesto a disposición de la Autoridad Judicial.
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