Agentes de la Policía Nacional ha detenido a un joven, de 25 años, por, al parecer, irrumpir en una quirófano del Hospital Materno Infantil y, presuntamente, amenazar al personal sanitario que estaba atendiendo a su hija de cuatro años. Además, la madre ha sido imputada a causa de los citados hechos, según han confirmado a Europa Press fuentes policiales.

El suceso ha tenido lugar en urgencias del área de Pediatría, a donde habían acudido los padres de la menor porque había sufrido un corte. Así, tras una primera cura, los médicos decidieron que pasara a quirófano para someterla a una pequeña intervención con el fin de que le suturaran la herida.

Para llevar a cabo la intervención, al parecer, hubo que sujetar a la menor con unas correas para evitar que se moviese, dado el estado de nerviosismo que la niña tenía, momento en el que la menor comenzó a gritar y a llorar, por lo que los padres, que estaban fuera, intentaron entrar en el quirófano para acompañarla.

Un empleado de seguridad del hospital les informó a los progenitores de que no podían pasar, momento en el que el padre apartó al vigilante, llegó al quirófano y, supuestamente, amenazó a la doctora y a la enfermera que asistían a la pequeña.

Los progenitores permanecieron en la sala de operaciones mientras el personal sanitario terminaba de atender a la menor y, una vez finalizada la cura, se marcharon del área de Pediatría. No obstante, cuanto iban a abandonar el centro, se encontraron con una unidad del Cuerpo Nacional de Policía que había sido avisada por el centro sanitario.

Por los citados hechos, los agentes procedieron a la detención del padre de la menor acusado de un presunto delito de amenazas. Los funcionarios imputaron también a la madre, a la que dejaron a cargo de la niña.