El consejero de Presidencia, Manuel Campos, ha confirmado que el individuo acusado de haber atacado a su madre con un arma blanca provocándole diversos cortes superficiales y, posteriormente, intentar suicidarse en Caravaca de la Cruz (Murcia), ha pasado a disposición judicial.

Según informaron a Europa Press fuentes de la Consejería de Sanidad y Política Social, la madre permanece ingresada en planta del hospital del Noroeste desde el pasado sábado, aunque continúa evolucionando favorablemente.

Campos ha explicado que se trata de un tema "estructamente judicial", pero, según su conocimiento, una vez detenido, el agresor ha sido puesto a disposición del juzgado de Guardia, donde realizará su comparecencia e "ingresará en prisión teniendo en cuenta la naturaleza de los hechos y la pena que puede corresponderle".

En cualquier caso, Campos prevé que ingresará en prisión provisional "en tanto se dilucida el contenido de las actuaciones judiciales, se incoa el procedimiento y, en su caso, se le enjuicia".

Relato de los hechos

Los hechos se remontan al pasado sábado a las 10.00 horas, cuando el individuo, cuya identidad no ha trascendido, ha agredido a su madre presuntamente con un arma blanca causándole heridas superficiales cuando ambos se encontraban en el domicilio familiar, situado en la calle Cuesta de Don Álvaro número 6 de Caravaca de la Cruz.

Posteriormente, el agresor subió a la azotea del inmueble y amenazó con arrojarse al vacío, desde una altura de 25 ó 30 metros, según informaron a Europa Press fuentes del Centro de Coordinación de Emergencias y de la Policía Local de Caravaca.

Al lugar acudió la Guardia Civil y una ambulancia del Servicio Murciano de Salud (SMS), cuyo personal sanitario atendió a la víctima, que presentaba unos cinco cortes superficiales efectuados, al parecer, con un arma blanca, aunque las heridas no eran graves y la mujer fue trasladada al hospital de Caravaca de la Cruz.

El Centro de Coordinación de Emergencias envió igualmente al lugar efectivos de atención psicológica para atender al presunto agresor, que amenazaba con arrojarse al vacío.

El individuo no se entregó voluntariamente, sino que tuvo que ser reducido por los agentes de Policía Local y de la Guardia Civil sobre las 14.10 horas, y posteriormente fue llevado a un centro médico para ser sometido a los exámenes pertinentes.