Los montes andaluces gestionados por la Consejería de Agricultura, Pesca y Medio Ambiente en las provincias de Cádiz, Córdoba, Huelva, Jaén, Málaga y Sevilla han generado en la última campaña un total de 4.124.871 kilogramos de piña, un recurso cuyo aprovechamiento, además, ha creado hasta 3.701 jornales.

Según datos facilitados por la Consejería en un comunicado, Jaén ha sido la provincia en la que más cantidad de piña se ha recogido —un total de 2.596.000—, seguida de Cádiz, con 1.016.600 kilogramos, y Huelva, con 254.625. Por detrás de estas tres provincias se sitúan Málaga, donde se han recolectado 113.831 piñas; Sevilla, con 93.815, y Córdoba, con 50.000.

Igualmente, en el conjunto de Andalucía se ha recolectado un total de 461.800 kilogramos de piña ecológica —un producto cuya demanda está experimentando "un progresivo crecimiento", según la Junta— en la última campaña, durante la cual la superficie total de piñares objeto de recolección ha ascendido a 95.680,40 hectáreas.

Según ha explicado la Junta, el "principal objetivo" de las actuaciones para el aprovechamiento de la piña es "regular el mercado y comercializar los productos, así como potenciar los sectores a los que estos van encaminados", además de "poner en valor las existencias y potencialidades de los montes".

En este sentido, la Administración andaluza ha destacado la "importancia ecológica, económica y social" que tiene este aprovechamiento para la comunidad, que cuenta con una superficie de forestal de "más de 270.000 hectáreas de pino piñonero", lo que convierte a este producto en "el aprovechamiento de mayor valor económico que se obtiene de 'Pinus pinea'", a la par que "un ejemplo de sostenibilidad".

Para incrementar la producción de piña en los pinares andaluces, la Junta está impulsando estudios de 'I+D+i', entre los que figuran "la identificación de clones con mayor capacidad productiva que la media para su utilización en injertos o plantaciones", o "la búsqueda de nuevas técnicas que permitan conocer con mayor precisión el volumen de cosecha esperado", un problema que la Junta considera "clave" para el sector "dado el carácter irregular que presenta esta especie".

Implantación de nuevas tecnologías

De igual modo, la Junta ha destacado "la implantación de nuevas tecnologías" que se está aplicando en la comunidad en este terreno, en el que se ha desarrollado "un sofisticado mecanismo de automatización acoplable a la mayoría de los cabezales vibradores utilizados que aplican la frecuencia necesaria para que caiga el fruto maduro sin ocasionarle al árbol daño alguno".

Así, mientras en las provincias de Córdoba, Cádiz y Huelva se ha empleado durante la última campaña maquinaria pequeña, "muy ágil en sus movimientos", que ha permitido "una gran rapidez en la recogida", en la provincia de Jaén se ha recogido la piña de forma mecanizada, "aprovechando la gran cantidad de maquinaria de vibración que se emplea en la recolección de la aceituna en el olivar".

También se han mejorado, según la Junta, los procedimientos de desembosque de la piña con el empleo de aperos que "facilitan la retirada mediante tractores y posterior carga de manera directa al camión, reduciendo el número de movimientos y evitando contaminaciones de la piña con la tierra del suelo", una cuestión "de vital importancia para el posterior proceso de transformación con calidad".

En esta línea se enmarca la creación de una sociedad cooperativa de integración, 'Corporación Piñandalucía', que agrupa a Coforest SCA, Santiago Perea SL y la Junta de Andalucía, "un proyecto empresarial de gestión netamente andaluz basado en la colaboración público-privada creado para potenciar, regular y desarrollar el sector de la piña y el piñón bajo criterios de sostenibilidad integral", tanto "económica como social, medioambiental y territorial".

Un producto beneficioso para la salud

Con un alto contenido en proteínas, el piñón andaluz cuenta con ácidos grasos mono y poliinsaturados "muy beneficiosos" para la salud humana, y es rico en minerales como potasio, fósforo, zinc, magnesio, hierro, ácido fólico y calcio. Sus principales consumidores son, actualmente, los países árabes, Estados Unidos y Alemania.