La Policía Nacional ha detenido a un hombre hasta en tres ocasiones en tan solo seis días por robar en el interior de vehículos de turistas que se encontraban en la capital hispalense. Al hombre se le imputan 38 delitos de la misma naturaleza cometidos en las inmediaciones de la Plaza de España, según informa la Policía Nacional a través de un comunicado.

El detenido, identificado como F.A.N.V., está especializado en detectar automóviles de turistas y robar en su interior fracturando una luna o forzando la cerradura, y su zona de actuación es el entorno de la Plaza de España, con especial predilección por la bolsa de aparcamientos de la calle Palos de la Frontera y aledañas.

La Policía Nacional lo detuvo el pasado día 5 de agosto cuando robaba en el interior de un automóvil con matrícula extranjera en la calle Palos de la Frontera de Sevilla. Al detenido, un conocido delincuente especializado en este tipo de hechos, ya lo habían sorprendido agentes de la Policía esa misma semana en otras dos ocasiones, siempre en la misma calle.

El detenido por tercera vez en seis días —la primera fue el día 31 y la segunda el día 3— es conocido por todos los agentes de Policía Nacional del Grupo Hércules, de la Comisaría de Distrito Centro, por ser el presunto responsable, desde el mes de abril, de un incremento notable de los robos en el interior de los vehículos estacionados en las proximidades de la Plaza de España y el Parque de María Luisa y, de manera especial, de la calle Palos de la Frontera, donde los vehículos violentados son siempre de procedencia extranjera.

El imputado sabía que los turistas que solo permanecen unos días en la ciudad son víctimas difíciles de localizar por la Policía tras abandonar la ciudad, por lo que los agentes debían trabajar a gran velocidad tras el momento de la denuncia. Por esta razón, la Policía baraja la posibilidad de que el número de robos cometidos podría ser incluso superior de los 38 que ahora se le imputan.

Así, con la llegada del verano y el incremento del número de turistas, el detenido extendió su actividad a las autocaravanas, disparándose el número de robos en el interior de las mismas cuando estacionaban en la referida zona. En alguna ocasión este había sido sorprendido por sus moradores cuando se encontraban en el interior y, en otras, identificado por su perfil genético tras las inspecciones de la policía científica.

De esta manera, los agentes han establecido un dispositivo permanente en torno al área afectada, con vigilancias estáticas y dinámicas, especialmente en las horas centrales del día, ya que es cuando aumenta la afluencia de turistas y es el momento en el que el imputado actuaba, sabedor de que los propietarios de los vehículos estaban visitando la capital.

Gracias a este dispositivo los agentes han detenido 'in fraganti' a F.A. en varias ocasiones, tres de ellas en la última semana, llegando, en una de las ocasiones, a enfrentarse a los agentes con un punzón y una navaja.

Se da la circunstancia de que, desde el mes de abril, cada vez que el detenido pasaba unos días en prisión, el número de delitos de esta naturaleza en su zona de actuación se reducía a cero, como ya comprobaron los agentes en el referido mes cuando ingresó en el centro penitenciario durante doce días, produciéndose un robo el día antes y otro prácticamente de manera inmediata tras su puesta en libertad.