Durante los meses de junio y julio el número de incendios de vegetación (agrícolas y forestales) ha aumentado un 60 por ciento respecto al mismo periodo de 2011, sin embargo la superficie quemada ha sido prácticamente similar a la del año pasado.

Así se desprende del balance de la primera mitad de la campaña de verano de prevención y extinción de incendios forestales que realiza el Gobierno de Navarra.

En concreto, la Agencia Navarra de Emergencias ha extinguido 278 incendios (95 en junio y 183 en julio) que han afectado a una superficie estimada de 559 hectáreas, (87,3 en junio y 471,7 en julio). En los mismos meses de 2011 el número de incendios de vegetación fue de 173 y la superficie calcinada se estimó en 540,20 hectáreas, un 3,5 por ciento menos que este año.

Los parques de bomberos con más intervenciones en incendios de vegetación han sido el Central con 50, el comarcal de Tudela con 45, el comarcal de Estella con 38 y el urbano de Pamplona también con 38. Menos actividad han registrado los efectivos de Peralta, que han intervenido en 28 incendios, Lodosa en 24, Tafalla en 23 y Oronoz en 11. El resto de parques comarcales (Alsasua, Sangüesa, Navascués y Burguete) no han llegado a la decena de intervenciones cada uno.

Según la ANE, la mayoría de sus intervenciones se han debido a fuegos provocados en la realización de tareas agrícolas de recolección de cereal y empacado de paja o en algunos apilamientos de paja en los campos.

Durante la primera mitad de la campaña forestal de verano, que comenzó el 1 de junio y concluirá el 30 de septiembre, el riesgo de incendio en Navarra ha sido alto o muy alto debido a, entre otros factores, la ausencia prolongada de lluvias.

A esta situación de sequía se han añadido la presencia de vientos moderados y fuertes, las altas temperaturas diurnas y el hecho de que muchos días la humedad relativa no se haya recuperado durante la noche.

Actuaciones realizadas por el departamento de medio ambiente

A lo largo de esta campaña forestal de verano el Departamento de Desarrollo Rural, Medio Ambiente y Administración Local ha movilizado en 15 ocasiones al guarda de la demarcación donde se produjeron los fuegos de vegetación que afectaron a superficie forestal. Asimismo, al incendio declarado en Zúñiga el 19 de julio, y que fue establecido como de nivel 2, se desplazó también un ingeniero.

En el caso del incendio de Ujué, el 25 de julio, se movilizaron, debido a la gravedad del siniestro, tres ingenieros, cuatro guardas y dos máquinas pesadas, que bajo las instrucciones del personal de este Departamento establecieron sendos cortafuegos en los flancos.

Actuaciones de la policía foral

Por su parte, desde comienzos de año y hasta el 31 de julio, la Policía Foral ha realizado 138 actuaciones relacionadas con incendios de vegetación, entre las que destacan la elaboración de dos atestados, más de cincuenta diligencias y una decena de informes. Además, también ha tramitado 48 denuncias administrativas por diversos incumplimientos de normativa relacionada con el fuego.

En cuanto a los dos atestados, se han abierto sendas investigaciones policiales por un incendio producido en Fitero el 28 de mayo, que afectó a una superficie estimada de 19 hectáreas, y otro en Ujué el 25 de julio, que calcinó 237 has.

Estas investigaciones determinaron que el incendio de Fitero podría haber sido provocado al prender con un mechero materia orgánica altamente inflamable presente en el lugar, si bien no pudo identificarse al autor material. Respecto al incendio de Ujué, la Policía Foral sigue investigando las causas y su posible autoría.

Sobre las principales causas de los 138 incendios que ha atendido, la Policía Foral afirma que fueron, entre enero y marzo, la quema de lindes que se produce habitualmente en la mitad sur de Navarra; la quema de pastos y restos de podas, entre marzo y mayo; la quema de pelusas de chopo, en mayo y junio; y las negligencias y motivos mecánicos en julio.

De hecho durante este último mes la Policía Foral ha atendido cinco incendios provocados por cosechadoras, dos por empacadoras, otro por el tendido ferroviario y otro por una línea eléctrica.

Dispositivo desplegado por el gobierno

La campaña forestal de verano comenzó el pasado 1 de junio y concluirá el 30 de septiembre y en ella intervienen tanto personal de la Agencia Navarra de Emergencias como del Departamento de Desarrollo Rural, Medio Ambiente y Administración Local.

Al igual que en años anteriores, la Agencia Navarra de Emergencias cuenta para la campaña de prevención y extinción de incendios forestales con 748 bomberos, entre los 440 profesionales adscritos a la Agencia, los 150 bomberos voluntarios y el personal contratado de forma específica para la campaña de verano, 158 auxiliares.

Los parques de bomberos que se han reforzado con personal eventual son el Central, Miluce, Estella, Tafalla, Sangüesa, Peralta, Lodosa y Tudela.

Para combatir los incendios de vegetación la ANE también cuenta con 19 bombas forestales pesadas, cinco bombas nodrizas pesadas y 32 vehículos de transporte de personal repartidos por todos los parques de bomberos. Asimismo, como mínimo, 149 bomberos conforman el turno de mañana y 178 el de tarde en los parques.