La Policía de la ciudad colombiana de Barranquilla descartó este viernes que el español Antonio Gómez Gómez muriera el pasado miércoles durante un robo e investiga su confuso asesinato, en el que pueden haber participado sicarios, informaron fuentes oficiales.

El comandante de la Policía de Barranquilla, el general José Vicente Segura, explicó que "la hipótesis del hurto del teléfono móvil pierde fuerza al ver cómo sucedieron los hechos", pues Gómez Gómez estaba solo y "al final no le robaron nada".

"Estamos investigando si se trata de un caso de sicariato, porque se sabe que él tenía recursos, algunas propiedades, y habría que ver a quién le puede beneficiar su muerte o si tenía deudas", agregó el alto mando policial.

La muerte se produjo el miércoles por la noche en el municipio de Puerto Colombia, vecino a la caribeña Barranquilla, donde el ciudadano español vivía con su esposa colombiana desde hacía poco más de un año.

Las primeras informaciones apuntaban a que la víctima fue asaltado por dos individuos que querían robarle el teléfono móvil, y al resistirse recibió dos balazos en el pecho y en la cabeza que le causaron la muerte.

En Colombia se han incrementado los casos de asesinato vinculados a robos de teléfonos móviles, por lo que las autoridades han puesto en marcha una campaña de concienciación entre los ciudadanos para que no compren aparatos robados y denuncien los hurtos.

Para esclarecer este confuso episodio, las autoridades colombianas han formado un grupo especial en el que hay miembros de la policía judicial, la división de inteligencia y la Fiscalía.

Según el general Segura, "la viuda y los hijos, que viven en España, están decidiendo si el cuerpo de Gómez Gómez será o no repatriado".