El sindicato Comisiones Obreras ha informado este jueves que Castilla-La Mancha ha registrado durante el primer semestre del año un aumento del 47 por ciento en accidentes mortales producidos en el lugar de trabajo, lo que sitúa a esta región como la segunda Comunidad Autónoma con mayor índice de incidencia mortal.

En concreto, se han producido un total de 9.520 accidentes de trabajo con baja en jornada laboral, de los que 9.395 han sido leves, 100 graves y 25 han tenido consecuencias mortales, según ha informado CCOO en nota de prensa.

En comparación con los datos del mismo periodo de 2011, destaca la reducción del número total de accidentes en 3.257, la disminución de los accidentes de tipo leve y grave en 3.244 y 21, respectivamente, y el "preocupante" aumento de ocho accidentes mortales más.

Además, a pesar del descenso de la actividad, "debido a la crisis económica y al descenso de la temporalidad en los sectores de mayor siniestralidad como en el caso de la construcción y la industria", la mortalidad laboral se incrementa en estos sectores (un 41 y un 102 por ciento, respectivamente).

Por provincias

A nivel provincial, los peores datos los registra Toledo, con un total de cinco accidentes mortales más que en 2011, y Ciudad Real con tres accidentes más de este tipo.

El resto de provincias mantiene sus datos de mortandad y, en general, todas reducen las cifras totales de accidentes. Así, Albacete registra una disminución de 664 accidentes, Ciudad Real de 848, Cuenca de 243, Guadalajara de 295 y Toledo, a la cabeza de los datos, registra una reducción de 1.207 accidentes.

Para el secretario de Acción Sindical y Salud Laboral de CCOO, Jesús Camacho, el "preocupante y alarmante" aumento de los accidentes mortales se debe a "la relajación de los empresarios en el cumplimiento de sus obligaciones preventivas y a la ausencia y carencia de política preventiva del Gobierno regional".

Según Camacho, no hay recursos para cumplir el Acuerdo Estratégico 2008-2012 para la prevención de riesgos laborales firmado con el anterior Gobierno socialista, ya que "desde que el nuevo Gobierno tomó posesión no hay prácticamente política preventiva".

"Todos aquellos convenios y acuerdos de colaboración que tenían que ver con el asesoramiento y la formación de trabajadores y empresas están completamente paralizados y, además, no hay disposición presupuestaria para hacerlo posible", ha añadido.

CCOO asegura que "si el Gobierno no da ejemplo en sus políticas preventivas, los empresarios seguirán ese mal ejemplo", por lo que prevén que esta situación se agrave aún más.