El alcalde de Carmona (Sevilla), Juan Ávila (PP), ha manifestado su férrea pretensión de no emprender despidos en esta administración local que gobierna en minoría, ha defendido que las sociedades pertenecientes al Ayuntamiento "aportan mucho y no ponen en riesgo la economía" municipal e incluso ha considerado "rentable" la empresa pública 'Limancar', objeto de liza política a cuenta de su situación financiera.

En una entrevista con Europa Press, Juan Ávila ha desgranado la situación financiera del Consistorio de Carmona. Según ha manifestado, a su llegada al Ayuntamiento, éste arrastraba "una deuda de en torno a 19 millones de euros", toda vez que la liquidación de los presupuestos correspondientes a los ejercicios 2010 y 2011, —los dos últimos del mandato socialista—, arrojaron "un déficit de ocho millones de euros". "El PSOE gastó ocho millones de euros más de lo que tenía previsto ingresar", ha lamentado el primer edil sobre la gestión del exalcalde Antonio Cano.

"austeridad" desde el principio

Por eso, ha puesto de relieve que su desembarco en la Alcaldía fue seguido de un principio de "austeridad absoluta" que se tradujo, por ejemplo, en reducciones presupuestarias "del 70 por ciento" en la tradicional feria del municipio y la de su población de Guadajoz. En la misma línea, ha recordado que el plan de ajuste promovido por el Ayuntamiento para adherirse al real decreto Ley 4/2012, que habilita vías de financiación para que las administraciones salden deudas con sus proveedores a cambio de sacrificios en el gasto corriente y las inversiones, fue aprobado por "unanimidad" de todas las fuerzas políticas. "El plan no contempla despidos a los trabajadores. Lo exigía la oposición y yo lo he compartido siempre", ha manifestado el alcalde, quien ha reprochado no obstante a las fuerzas de oposición la ausencia de propuestas "alternativas" para el plan de ajuste.

Este plan, de cualquier modo, contempla un incremento progresivo del 1,5 por ciento en determinados gravámenes a partir de 2015 y la supresión de un complemento de productividad por objetivos del que gozaban algunos trabajadores del Ayuntamiento. De cualquier modo, Juan Ávila ha defendido su idea de "conservar todos los puestos de trabajo del Ayuntamiento" y ha explicado que "sólo dos o tres personas" se han visto afectadas por su plan de ajuste "tras haber finalizado sus contratos por obra y servicios".

Las sociedades municipales

Juan Ávila también ha dedicado palabras a las sociedades municipales 'Sodecar' (Sociedad para el desarrollo de Carmona) y 'Limancar' (Limpieza y Mantenimiento de Carmona), en las que trabajan aproximadamente 390 empleados. Mientras municipios como Utrera, Los Palacios y Villafranca, Palomares del Río, Guillena o Burguillos, por citar algunos ejemplos, han promovido concursos voluntarios de acreedores o procedimientos de disolución sobre sus sociedades municipales, Ávila defiende que 'Sodecar' y 'Limancar' "son sociedades que aportan mucho a Carmona y no ponen en riesgo la economía municipal".

El alcalde de Carmona ha reconocido "las críticas" siempre asociadas a 'Limancar', cuya deuda superaba en 2010 los dos millones de euros según denunciaba entonces la oposición, pero ha defendido que esta sociedad municipal "es rentable". En ese sentido, ha argumentado que por lo que al periodo 2011/2012 se refiere, 'Limancar' arroja un "superávit que ronda los 400.000 euros", con lo que "se trata de una empresa rentable y vamos a demostrarlo. No creo que la solución de Limancar pase por el despido de trabajadores".

El problema de 'Limancar', según ha razonado, parte de que esta sociedad municipal "absorbe a veces competencias que corresponden a otras delegaciones del Ayuntamiento" para solventar las "demandas" ciudadanas. "Estamos trabajando para resolver esto a través del presupuesto, para que esa demanda sea reflejada en los presupuestos", ha explicado Ávila.