La presidenta de Castilla-La Mancha, María Dolores de Cospedal, ha indicado que el fuego declarado este miércoles en Chequilla (Guadalajara), y que sigue activo en el Parque Natural del Alto Tajo, tiene mil hectáreas perimetradas, "lo que no significa que todas ellas hayan ardido", ya que hay algunas zonas dentro del perímetro que no se han visto afectadas.

Ha señalado que no se desactivará el nivel 2 de alerta para seguir contando con efectivos de la Unidad Militar de Emergencia (UME) "porque el viento puede soplar y la temperatura aumentar", lo que dificultaría las labores de extinción.

Cospedal, que a primera hora de la mañana ha visitado el puesto de mando ubicado en el Alto de Megina, ha subrayado que en este momento hay 250 personas y 17 medios aéreos trabajando, y ha apuntado que el fuego "puede que se originara por un descuido" en una vivienda de la localidad de Chequilla.

La presidenta regional se ha felicitado de que "ninguna persona se haya visto afectada", y ha destacado que los vecinos de los municipios de Alcoroches y Chequilla que han tenido que pasar la noche fuera de sus viviendas "no se han visto en peligro, gracias sobre todo al trabajo de Protección Civil".

La jefa del Ejecutivo castellano-manchego ha agradecido también la labor de los distintos efectivos que se encuentran trabajando en la zona, desde los miembros de la UME hasta los bomberos de Guadalajara y el personal de Geacam, y se ha mostrado esperanzada en que las condiciones meteorológicas acompañen.

En este sentido, ha destacado que "es una suerte" estar en una comarca donde las temperaturas a lo largo de la noche son bajas, lo que facilita las labores de extinción.