El presidente de la comisión de Cultura del Cabildo de la Catedral de Santiago, el canónigo Daniel Lorenzo, ha asegurado que el templo compostelano "si tuviera medios haría" un inventario de su patrimonio y ha destacado que "nunca impidió" a las instituciones su elaboración, a las que, como ha indicado, la iglesia "abrió las puertas incluso de las zonas de clausura".

De esta manera se ha manifestado a preguntas de los periodistas sobre el patrimonio cultural que se incluye en las propiedades de la Catedral de Santiago y de la cual, a su juicio, "cualquier especialista en arte" tiene conocimiento, "incluso de aquellos objetos que no se exhiben".

"Si alguien tiene interés de conocer el patrimonio del templo lo puede hacer a través de los catálogos, libros o publicaciones, pero incluirlo en un catálogo accesible es una cuestión que puede ser competencia de otras administraciones", ha puntualizado.

En este sentido, ha señalado que la Catedral recibió "presupuestos de proyectos y estudios" para su divulgación como la creación de fichas virtuales sobre las piezas, "pero no se afrontó la posibilidad debido a su elevado coste".

"En otras zonas como Andalucía estos temas los gestiona la propia Administración autonómica y la Iglesia lo que hace es dar toda clase de facilidades para que se lleve a cabo", ha apuntado, antes de insistir en que la institución eclesiástica "puede hacer el inventario con la colaboración de administraciones, pero no sin ella".

Llama a la colaboración

Ante estas cuestiones, el presidente de la comisión de cultura ha aprovechado para hacer un llamamiento a las instituciones públicas, empresas privadas y a la sociedad en general a colaborar con la conservación y la difusión del patrimonio del templo.

Y es que, a su juicio, la Catedral de Santiago es "uno de los grandes tirones para que acuda gente a Santiago y apenas recibe casi nada, unos céntimos de euro, de esa gran capacidad".

"No hay patrimonio ni monumento más abierto que esta Catedral de Santiago, pero la sociedad tiene que reconocer que, aunque es uno de los grandes tirones para que aquí venga muchísima gente, a penas recibe casi nada".

Por ello, ha abogado por "habilitar una fórmula" para que las instituciones y la sociedad "sean conscientes" de que "hay cuestiones que se deben hacer en colaboración" ya que, el templo, "como lugar abierto no las puede gestionar".

"Resulta más fácil entrar en la Catedral de Santiago o en el Museo del Prado, el museo es tuyo y mío, la catedral tiene su dueño, lo mismo pasa con el palacio real o el ayuntamientno", ha puesto como ejemplo para reclamar "colaboración" en la conservación y divulgación del patrimonio.