Como adelantó 20 minutos el 1 de abril, esta prueba no computará en el expediente académico: su única función es tomar medidas para reducir el fracaso escolar. Pero el examen sí estará a disposición de los padres que quieran conocer cuál es el nivel educativo de sus hijos.
Lengua y matemáticas
La prueba consistirá en un pequeño dictado (de unas cinco líneas), un ejercicio de comprensión de texto escrito, unas preguntas sobre el medio cultural o social y un ejercicio de matemáticas.
«Queremos tener un diagnóstico de los escolares antes de que comiencen secundaria», explicó ayer Aguirre. La Comunidad no descarta repetir este tipo de examen todos los años.
Profesores y padres, escépticos
Esta prueba, pionera en la comunidad, no acaba de convencer ni a los educadores ni a los padres de los alumnos. La sección de Educación de CC OO considera que debería hacerse mucho antes, cuando aún se está a tiempo de corregir disfunciones educativas.
Para la Federación de Padres Giner de los Ríos «la mejor prueba es la educación continua».
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