En la provincia, entre el 5 y el 10% de las 2.500 rupturas de matrimonios y parejas de hecho del año pasado generaron estos perjuicios a los hijos. Para mitigar las consecuencias sobre los menores, la Junta y los juzgados de familia de Málaga entregarán el citado decálogo a las parejas. Además, antes del juicio, se les proyectará un vídeo destinado a inculcarles las claves para que este proceso no afecte a sus hijos.
Mediación familiar
Solución alternativa: «En cualquier caso, siempre que es posible, intentamos que las rupturas se resuelvan mediante el sistema extrajudicial de mediación familiar», recalcó ayer López. El porcentaje de separaciones de mutuo acuerdo alcanzó este año en la provincia el 75% de rupturas, superando la media nacional en un 10%, indicó López.
Algunos consejos
Un niño no es un mensajero: No critique ni mande mensajes a su pareja a través de sus hijos menores de edad.
Arma arrojadiza: No obligue a sus hijos a tomar partido. Elegir entre usted o su pareja los perjudica emocionalmente.
Protección: No es recomendable que los menores presencien discusiones matrimoniales con llantos o gritos.
Decálogo completo: En www.20minutos.es/malaga está el texto completo del documento que ha editado la Junta.
Mª Ángeles Peña psicóloga mediadora
«Los niños pasan a ser violentos o desganados»
¿Cuándo actúa el servicio de mediación?
Cuando un juez lo recomienda o una pareja en trámites de divorcio pide que mediemos.
¿Qué hacen?
No practicamos terapia para intentar salvar el matrimonio: tratamos de desbloquear la situación para que los miembros de la pareja lleguen a un acuerdo por sí mismos. Al contrario que en un juicio, nosotros no tomamos las decisiones. Son los cónyuges quienes deciden.
¿Cómo afecta una separación conflictiva a los hijos menores de edad?
Pueden sufrir ansiedad, volverse agresivos, hacerse pipí encima o mostrarse desganados.
Pero todos los divorcios son duros por definición...
El problema no es el divorcio, sino la forma de divorciarse. Este proceso requiere un tiempo de adaptación tanto a los padres y madres como a los hijos. Lo que hay que evitar es, por ejemplo, ridiculizar un regalo hecho por la pareja al niño o minusvalorarlo. Se debe dar al niño la libertad de estar a gusto.
BIO
Nació en Madrid hace 49 años. Trabaja en los juzgados de familia desde 1983.
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