El Consejo de Ministros aprobará previsiblemente este viernes el techo de gasto para 2013, el primer paso para la elaboración de los Presupuestos Generales del Estado (PGE) para el próximo año, partiendo de una cifra de déficit del 4,5% del PIB, en lugar del 3%.

Las cuentas podrán contar con este mayor margen, dentro de la línea de austeridad de los últimos años, después de que el Eurogrupo aprobara el pasado lunes, 9 de julio, una relajación del calendario de ajuste fiscal para España. Los nuevos objetivos de déficit serán el 6,3% en 2012, el 4,5% en 2013 y el 2,8% en 2014.

Como condición, el Gobierno se ha comprometido a elaborar por primera vez unos Presupuestos con carácter plurianual que abarcarán el periodo 2013-2014.

Por ello, el Consejo de Ministros prevé presentar también la senda de consolidación presupuestaria con objetivos de déficit para los años 2014 y 2015, en el que podría detallarse también la desviación prevista correspondiente al menos al Estado, según fuentes del Ministerio de Hacienda.

De momento, el Ejecutivo planteará las previsiones de ingresos y gastos de la administración central para el próximo año y, aunque está por precisar qué cifra de déficit corresponde al Estado, las mismas fuentes confirmaron que será superior al 2,5% del PIB previsto hasta la fecha, en línea con la relajación del objetivo del conjunto de las Administraciones, del mismo modo que las comunidades autónomas lo han visto ampliado del 0,5% al 0,7%.

Por otro lado, las cuentas públicas también incorporarán el nuevo paquete de ajustes convalidado este jueves en el Congreso, que tendrá impacto también en las partidas de gastos e ingresos.

De la misma forma, el Gobierno prevé actualizar el cuadro macroeconómico para elaborar el techo de gasto, en el que, de cumplirse las previsiones de los organismos internacionales, la previsión de crecimiento del 0,2% el PIB en 2013 podría dar paso a otro ejercicio en recesión.

El ministro de Economía y Competitividad, Luis de Guindos, señaló el pasado martes en el Senado que la caída de la economía española podría estar este año más cerca del 1,5% que del 2%, mientras que las previsiones apuntan a un descenso del 1,7%. Sin embargo, no ocultó que los indicadores económicos siguen hablando de "debilidad".

Además, el Gobierno no ha ocultado que las medidas de ajuste adoptadas la pasada semana, que implican menos ingresos para los funcionarios o la subida del IVA, penalizarán el consumo y debilitarán aún más la economía en el corto plazo.

Con estos antecedentes, preguntado este jueves en los pasillos del Congreso de los Diputados por si habrá cambios sustanciales en el cuadro macro, De Guindos respondió: "Sustancial, nada".

Asimismo, el Gobierno podría presentar también sus nuevas cifras de empleo y paro para 2013, año en el que la reforma laboral ya habrá cumplido su primer año de vigencia, con lo que estas previsiones serán observadas con lupa por parte de los sindicatos, que ya convocaron una huelga general el pasado mes de marzo contra la reforma.

Una vez que el Gobierno dé luz verde al techo de gasto lo enviará a las Cortes para su convalidación durante la próxima semana. Después del verano, el trámite continuará y presentadas las nuevas cuentas, también habrán de recibir el visto bueno del Congreso y del Senado.