Las autonómicas serán en mayo, por lo que no habrá ley antes del verano del año próximo, como pronto, tres años después.

Desde diciembre de 2005, cuando IU registró en la Asamblea una proposición al respecto, se han celebrado dos reuniones entre técnicos, empresas, sindicatos y grupos parlamentarios.

El fruto de estos encuentros ha quedado plasmado en un borrador que recoge qué aspectos tendrá que desarrollar la ley: fijar las dimensiones y características de los cochecitos, determinar hasta dónde llega la responsabilidad del conductor, establecer si tendrán prioridad las sillas de ruedas sobre los carritos o viceversa...

Vieja reivindicación

Poder viajar en el autobús con el bebé montado en el carrito, como sí se puede hacer en Metro y Cercanías, es una vieja reivindicación de IU y colectivos como Mujeres Urbanistas, que el año pasado recogió 4.000 firmas.

Para Reyes Montiel, diputada de IU, las sillas de niño podrían subir desplegadas en los autobuses madrileños desde hace tiempo, como ya ocurre en ciudades como Barcelona, "si hubiese voluntad política para ello".

"No era necesario hacer una ley: hubiera bastado con modificar la de Promoción de la Accesibilidad para que ésta reconociera a los padres con carritos de bebé como personas de movilidad reducida", dice Montiel. A su juicio, el trámite hubiese tardado sólo quince días, en vez de al menos dos años.