El expresidente de la Generalitat de Cataluña Jordi Pujol ha afirmado este lunes que en España hay "muchas cosas que no funcionan" y que una de ellas es el Estado autonómico, lo que se debe, a su juicio, a "generalizarse" el modelo a todas las comunidades.

"En España hay muchas cosas que no funcionan, no sólo la economía, muchas instituciones están desacreditadas. Una de las cosas que no ha funcionado es algo en lo que se habían puesto muchas esperanzas, que es el Estado de las autonomías. La generalización de las autonomías como se hizo no funcionó", ha señalado durante su intervención en los cursos de verano de la Universidad Rey Juan Carlos en Aranjuez.

Según ha explicado, en la transición sólo Cataluña y el País Vasco reclamaban la autonomía, pero ha lamentado que el sistema se "generalizó" después y ha "provocado una discusión". Es más, ha subrayado que la autonomía de la Generalitat y de Euskadi "no es el resultado de un apaño político, sino de una reivindicación".

Así pues, el expresidente catalán considera que podría haber un "arreglo fácil" para solucionar el problema del Estado autonómico, y es un sistema meramente provincial, "como en el siglo XIX".

Hay que tomar medidas,

Aunque sea "doloroso"

En su opinión, el origen de la crisis económica en España es que "durante bastante tiempo las cosas se han hecho muy mal", aunque ha reconocido que no sólo en nuestro país. "Y cuando las cosas se hacen mal mucho tiempo, negándose a darse cuenta de la realidad y no se da cuenta de lo que pasa, llega un momento que te encuentras con un muro y entonces hay que hacer lo que haya que hacer aunque sea muy doloroso", ha manifestado.

A la pregunta de si se pueden depurar responsabilidades políticas por la mala gestión de la economía, Pujol ha señalado que en democracia hay mecanismos como puede ser la convocatoria de elecciones, si bien ha dejado claro que no está de acuerdo porque la "expresión" de depurar responsabilidades no le gusta.

No obstante, ha insistido en criticar que "hace algunos años que las cosas se han hecho muy mal, con soluciones que no lo son porque son pequeñas reparaciones que duran tres semanas", algo que, a su juicio, "no pasa sólo en España", sino "sobre todo en el sur de Europa".