El centro de vacaciones Ligüerre de Cinca (Huesca) mantendrá un 70 por ciento de ocupación de media durante este verano, ha informado el gerente del centro, José Antonio Rufas.

No obstante, Rufas ha manifestado que este verano es más complicado que otros prever la cantidad de personas que se van a alojar en el centro vacacional, ya que los turistas están esperando a "última hora" para realizar sus reservas.

Así, el gerente de Ligüerre de Cinca ha indicado que la mayor ocupación se espera en el mes de agosto, "sobre todo en la primera quincena" del mes. Sin embargo, también ha recordado que, desde el inicio de la crisis económica, "los hábitos de los usuarios han cambiado".

"La gente ahora reserva cuando puede, y cuando puede es de hoy para mañana. Además, ahora prima el precio sobre el alojamiento, antes la comodidad era un valor añadido, ahora sólo importa que el lugar sea barato", ha apostillado Rufas.

En este sentido, ha asegurado que antes de la crisis la gente pasaba "más tiempo" de vacaciones, "ahora los aragoneses viajan pocos días y con poca previsión".

Ligüerre de Cinca es un pueblo de origen medieval que fue abandonado por la construcción del embalse de 'El Grado'. En 1986 fue cedido a UGT que se dedica, a través de la Fundacion Ligüerre de Cinca, a su rehabilitación para usos turísticos, sociales y agropecuarios.

En concreto, este proyecto pretende recuperar el lugar en el que vivían los antiguos habitantes y también la forma en la que lo hacían, el cultivo de la tierra.

El centro vacacional está situado en la comarca de Sobrarbe cerca de Ainsa, del Santuario de Torreciudad, del Parque Nacional de Ordesa, del valle de Pineta, del Cañón de Añisclo y de la Sierra de Guara.

Para José Antonio Rufas este centro es "una combinación de ocio, tranquilidad y conocimiento de la naturaleza", lo que hace de Ligüerre de Cinca "un destino ideal en el Pirineo Aragonés".

Asimismo, ha indicado que se trata de un destino turístico "curioso", dado que es "no hay que olvidar que estamos hablando de un pueblo rehabilitado".

En este punto, Rufas ha destacado que el turista que acude a Ligüerre se siente "habitante de un pueblo por unos días" y además de encontrar un "ambiente familiar" puede disfrutar de las vistas que proporciona el embalse "aunque este año hay poco nivel de agua".

Ligüerre de Cinca está situado a 94 kilómetros de la ciudad de Huesca y a 22 de Aínsa. El pueblo fue abandonado debido a la construcción del embalse de El Grado, pero en 1986 fue restaurado por el sindicato UGT como un centro de vacaciones.