Agentes de la Unipol de la Policía Local de Santa Cruz de Tenerife sorprendieron en la mañana de ayer a una joven de 15 años que estaba en los aledaños del barranco de Santos, al parecer distribuyendo diversas cantidades de hachís.

En el momento de interceptarla, la menor tenía en su poder unos 50 gramos de hachís, un cuchillo y una pequeña pesa digital, y estaba en compañía de un chico de 19 años.

Este servicio se inició dentro de la rutina de vigilancia de esa zona que tiene encomendada la Unipol, debido principalmente a que es utilizada como punto de encuentro de algunos jóvenes para consumir sustancias estupefacientes. También se han registrado en ese lugar diversos actos de vandalismo contra el patrimonio público.

Los agentes encontraron a los dos jóvenes junto al puente Javier de Loño Pérez tratando de trocear una placa de hachís. Una vez identificados, la menor asumió toda la responsabilidad y al chico, tras el oportuno cacheo, se le encontró una pequeña cantidad de hachís, por lo que se tramitó un acta administrativa por ello.

En el caso de la chica, fue necesario requerir la presencia de una agente femenina para realizar el cacheo, aunque no se detectó nada de interés. Los hechos se pusieron en conocimiento de la Fiscalía de Menores ordenándose la entrega de la menor a sus progenitores, quedando estos citados ante la autoridad judicial.