El grupo CLH ha obtenido la certificación medioambiental EMAS para la instalación de almacenamiento que la compañía tiene en Huelva, en reconocimiento al esfuerzo realizado para incrementar la sostenibilidad de sus actividades, de acuerdo a un exigente Sistema de Gestión Ambiental, y a su compromiso con la mejora continua.

En un comunicado, CLH explica que, mediante su adhesión a EMAS, la compañía se compromete a suministrar de forma periódica información sobre el comportamiento medioambiental de esta planta, a través de una declaración ambiental pública, redactada de manera clara y concisa, con datos verificados por organismos independientes.

La instalación de almacenamiento de Huelva es el primer centro de la compañía que obtiene la certificación EMAS. Para lograrlo, ha sido necesario presentar una declaración con los principales indicadores medioambientales de la planta y superar una auditoría externa.

La normativa EMAS es un reglamento voluntario de la Unión Europea que permite a las empresas que se adhieren a él gestionar de manera eficaz su política ambiental, reforzar su compromiso con la sostenibilidad, definir sus objetivos y verificar el grado de cumplimiento de los mismos.