El ministro de Interior, Jorge Fernández Díaz, y el presidente de la Generalitat valenciana, Alberto Fabra, han anunciado este martes la creación de una Comisión Mixta Interdepartamental —con presencia de ambas administraciones y las Diputaciones—, con el objetivo de fijar de aquí al viernes un nivel de ayudas para los afectados por los incendios de Cortes de Pallás y Andilla (Valencia), que pueda ser aprobado por el pleno del Consell y por el Consejo de Ministros, con el fin de atender "de manera inmediata" a los vecinos.

Así lo han indicado tras una reunión mantenida en el Palau de la Generalitat, para tratar de la situación generada por los incendios, y que se ha celebrado después de la visita que Fernández Díaz y Fabra han realizado a los familiares del piloto que había desaparecido al accidentarse un helicóptero que intervenía en las tareas de extinción del incendio de Cortes de Pallás, y visitar igualmente al piloto y copiloto del segundo helicóptero siniestrado, de los que el ministro ha resaltado que saldrán "adelante".

Durante su comparecencia, el ministro ha informado de la localización del helicóptero, en una zona de menor profundidad de lo que se pensaba, y posteriormente del hallazgo del cuerpo. El piloto es un coronel del Ejército en situación de reserva, experimentado, con 4.000 horas de vuelo, con tres hijos, dos de ellos policías, que se han desplazado a Valencia junto con la madre para estar cerca del lugar donde se buscaba el cadáver.

Fabra ha trasladado la "solidaridad y cariño" de todos los valencianos a la familia de la víctima por haber trabajado en un incendio que ha supuesto una "convulsión importante" en la vida valenciana y municipios afectados. El ministro les ha transmitido igualmente su agradecimiento a las familias y ha expresado el "mensaje de solidaridad" del presidente del Ejecutivo central, Mariano Rajoy ante la situación generada en Valencia. "Pese a la tragedia se ha puesto de manifiesto que se está trabajando bien", ha considerado.

Que reciban las ayudas "cuanto antes"

Según ha señalado el ministro, una vez "delimitados" los incendios, el objetivo es que los afectados reciban "cuanto antes las ayudas de las que se han hecho acreedores". Asimismo, ha señalado que el Consell solicitará un crédito extraordinario "si fuera necesario".

El presidente de la Generalitat ha hecho hincapié en que las tareas de extinción del fuego, que ha afectado a casi 50.000 hectáreas, se han visto dificultadas por un invierno muy seco y por condiciones metereolólogicas "extremas", con temperaturas de entre 30 y 40 grados, viento de más de 40 kilómetros por hora, muy cambiante, y con una baja humedad relativa. La operación de refrescar la zona y sellar el perímetro durará "varios días".

Coordinación "espléndida"

A preguntas de los medios, Fabra ha pedido que "nadie intente buscar una diferencia entre el presupuesto —para prevención y extinción— y la situación" provocada por el incendio. Así, ha señalado que "no es por una cuestión de falta de medios", ya que la diferencia del presupuesto actual con el anterior es de un millón de euros y el año pasado ardieron 2.500 hectáreas.

El ministro y el jefe del Consell han negado, también a preguntas de los medios, que haya habido descoordinación. De hecho, Fernández Díaz ha asegurado que la coordinación ha sido "espléndida". De hecho, ha afirmado que "si no fuera por esos accidentes de ayer, esa prueba —de la naturaleza— se ha superado", desde el punto de vista "de la respuesta que se podía dar". Reconocer eso "es de justicia".

Inquirido por la presencia del presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, Fernández Díaz ha señalado que han sido tres los ministros los que han venido a la Comunitat, con lo que "el Gobierno de España está aquí". Además, Rajoy "sigue día a día, a través del presidente de la Generalitat y los ministros la actualidad".

Tres oficinas de atención

Para la Comisión Mixta que, según ha explicado el ministro, las diputaciones representarán a los 22 municipios afectados, y que se reunirá esta misma tarde para, "de aquí al viernes", tener una evaluación lo más "aproximadamente" posible de los daños.

Fabra ha explicado que los ayuntamientos centralizarán las necesidades de los ciudadanos, que las tramitarán a tres oficinas de atención, que coincidirán geográficamente con la ubicación de los Puestos de Mando Avanzados, dos en Valencia y uno en Castellón.

Asimismo, las ayudas se centrarán en la reposición "de forma inmediata" de los servicios básicos a los municipios, para lo que las Diputaciones harán anticipos para reponer abastecimientos de agua, telefonía, accesos y alumbrado.

Prueba de la "naturaleza"

Fabra ha asegurado que la Generalitat ha "superado una difícil prueba". "La naturaleza nos ha examinado y hemos sido capaces de responder con mucha seriedad, responsabilidad y sensatez", ha considerado. En esta línea, el ministro ha remarcado que "si no fuera por esos accidentes de ayer, esa prueba —de la naturaleza— se ha superado". Reconocer eso "es de justicia", ha apostillado.

El ministro ha evidenciado las dimensiones del incendio al señalar que en los cinco primeros meses del año en toda España los incendios ha supuesto 50.000 hectáreas quemadas cuando en Valencia la superficie ardida llega en cuatro días a las 49.000.

Alta distinción

Fabra ha anunciado que el Gobierno valenciano reconocerá con la Alta Distinción de la Generalitat a todo el "equipo humano" que ha estado trabajando en la extinción de los dos incendios y en la evacuación de cerca de 4.000 vecinos de los 22 términos municipales afectados, tras calcinar cerca de unas 50.000 hectáreas de superficie. Durante estos días, ha destacado que han participado 1.800 efectivos en estas labores.

En este sentido, ha destacado la colaboración de todos los vecinos que, de forma "ordenada y responsable" han hecho los desalojos, sin incidentes, aunque eran zonas con muchos núcleos de población y viviendas diseminadas. Asimismo, ha resaltado la labor de la UME, de alcaldes, concejales, Guardia Civil, Bomberos y brigadistas.

Posteriormente, ambos han dicho que se trabajará para subsanar el impacto medioambiental, retirada de madera quemada y regenerar la zona en los plazos que dicten los técnicos.