La Audiencia de Valladolid ha citado para el próximo día 10 de julio a la extrabajadora de Mensajeros de la Paz Graciela L.B, acusada del triple asesinato de tres menores discapacitados en agosto de 2011 en Boecillo, con el fin de celebrar la vista definitiva en la que ésta ratifique si se conforma o no con los 45 años previamente pactados entre las partes personadas en la causa.

La vista se desarrollará a partir de las 11.00 horas bajo la presidencia del magistrado de la Sección Cuarta de lo Penal Ángel Martínez y con la asistencia del Ministerio Fiscal, la propia acusada y su representante legal, Genoveva de Paz Fernández, según informaron a Europa Press fuentes jurídicas.

La finalidad no es otra que conocer si la presunta filicida confirma que acepta el contenido del escrito de calificación pactado y firmado el pasado día 18 de junio entre las partes citadas, que contempla para la excuidadora una pena global de 45 años, a razón de 15 años por cada uno de los tres asesinatos, en lugar de los 60 años inicialmente pedidos para ella, y que incluye la prohibición de, una vez cumplida la condena, acercarse a Salamanca, Burgos y Valladolid por espacio de siete años.

En caso afirmativo, se dictaría una sentencia de conformidad—requiere además que las partes expresen su negativa a recurrir el fallo—que evitaría la celebración del juicio con jurado popular que estaba previsto.

El acuerdo se ha visto facilitado, sobre todo, por la retirada del proceso de las tres acusaciones particulares que representaban a las familias de las víctimas, que han sido ya indemnizadas y cuyas reclamaciones pecuniarias, dado lo elevado de las mismas, habían impedido hasta ahora el acercamiento de posturas con Mensajeros de la Paz y la Junta de Castilla y León, responsables civiles subsidiarios.

Asfixia mecánica

Los cadáveres de tres menores discapacitados de 3, 9 y 14 años que la acusada tenía a su cargo en el centro 'Nuevo Amanecer' de Mensajeros de la Paz, sito en el número 1 de la calle Almendro, en la urbanización El Moral de Boecillo, aparecieron el día 15 de agosto del pasado año en su habitación y con sus cabezas cubiertas con papel de cocina film. La autopsia constató como causa de la muerte la asfixia mecánica.

La procesada, que ha sido declarada imputable por los forenses, pese a reconocer que sufría un trastorno adaptativo, ha venido sosteniendo hasta ahora que no recuerda nada de lo ocurrido aquel trágico día.

Gabriela L.B, de origen uruguayo, ya protagonizó un intento de suicidio el 10 de septiembre del pasado año, cuando, de forma voluntaria, se arrojó desde una terraza del Centro Penitenciario de Valladolid y sufrió diversas fracturas, mientras que dieciocho días después, cuando se recuperaba de las lesiones en el Clínico Universitario, aprovechó un descuido de los sanitarios para abrirse los puntos de la herida.